Controlar dispositivos de la casa a la distancia o, bien, monitorear nuestro domicilio a través del celular ha dejado de ser un lujo para convertirse en una alternativa accesible para más personas. Y es que, así como evolucionan otros aspectos de la vida, los hogares cada vez se vuelven más ‘ inteligentes ’.
Gracias a la domótica , como se le conoce al conjunto de tecnologías aplicadas al manejo y la automatización de las viviendas, ya es posible hacer más sencillo el día a día de sus habitantes, así como ofrecer soluciones específicas a cada propiedad para aumentar tanto su confort como su funcionalidad.
“Los beneficios de tener todo integrado son realmente considerables. Por ejemplo, el control de la luz, el audio, las cámaras de vigilancia, entre otros, sobre todo ahora que pasamos mucho más tiempo en nuestros hogares”, resalta Ernesto Marcelo García, director general de HiTech Stdio, compañía proveedora de artículos
y servicios tecnológicos.
Tecnlogía al rescate
La principal ventaja que ofrece la domótica es poder automatizar y manejar desde lejos diversos aparatos y funciones de una vivienda, tales como la iluminación , el aire acondicionado, los dispositivos de audio o algunos electrodomésticos. “Puedes controlar todo lo que quieras: accesos a una residencia, cortinas, la puerta del
garage, sistemas de riego y más”, señala el especialista y participante de Expo Ambientes, evento enfocado en decoración.
Este manejo inteligente permite, a la vez, disfrutar de ahorros considerables en cuanto a c onsumo de energía. De acuerdo con datos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) de España, es posible economizar más del 50% de la demanda eléctrica de los hogares si se aplican distintas medidas.
Al respecto, la Encuesta Nacional sobre Consumo de Energéticos en Viviendas Particulares (Encevi), presentada en 2018 por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), arrojó que en un 98.7% de los hogares se suelen apagar los focos cuando no se necesitan y un 51.7% desconecta la televisión cuando no está
en uso, con la intención de generar un ahorro en el recibo de energía eléctrica.
La domótica sirve también para optimizar la seguridad de los inmuebles, a través de la supervisión de cámaras de videovigilancia, el control de puertas de entrada y la integración de alarmas, elementos que es posible controlar mediante el uso de una app instalada en el celular o tableta electrónica.
Otro beneficio es fomentar la accesibilidad para personas en situación de discapacidad o adultos mayores. “Una gran ventaja es que el sistema tiene la capacidad de funcionar por sí solo. De esta manera, es posible programar escenarios preestablecidos. Por ejemplo, que a las 11 de la noche se apaguen todas las luces de la
planta baja de tu casa si no se detecta movimiento”, explica David López Espinoza, director comercial de Domofy, empresa distribuidora de productos de domótica.
Todas estas funciones tienen como objetivo hacer la vivienda más ‘inteligente’, confortable y segura. Además, facilitan la comunicación entre el usuario y el sistema, al poder manejar desde lejos varias de estas acciones y supervisar el domicilio durante las 24 horas del día.
El costo de la domótica
“En sus inicios, la domótica funcionaba con cableado estructurado: se hacían ranuras, metían cableado por toda la casa y centralizaban éste a un solo rack. Hoy, los sistemas inalámbricos gozan de gran demanda y van orientados a desarrollar su propia aplicación para controlarse desde el celular, ya sea mediante internet o de
manera local, cuando se está en casa”, apunta el director comercial de Domofy.
De acuerdo con los especialistas, disponer de buena conexión de internet es el único requisito para emplear la domótica en una vivienda. “Esta tecnología puede controlarse también a través de asistentes de voz o pantallas inteligentes. Incluso, hoy en día, ya no se tiene que casar uno con la misma marca: pueden hacerse integraciones con casi todas las compañías”, subraya Ernesto Marcelo García.
Respecto a su costo , actualmente hay una gran variedad de opciones en el mercado para automatizar el hogar. Desde sistemas básicos hasta otros más complejos, la clave está en identificar las necesidades de cada vivienda y, si se es nuevo en el tema, comenzar por una habitación o una función específica.
“Empieza por automatizar la luz de tu recámara desde 300 o 400 pesos. El precio depende del nivel de control que cada quien desee. Si buscas un sistema que no dependa del Wi-Fi, puedes tener uno de tipo profesional y robusto por unos 15 o 16 mil pesos, en promedio. Esto contempla un control de iluminación
en las áreas comunes, sensores para controlar accesos de puertas y ventanas, así como el manejo de cámaras. La gran mayoría de los sistemas están pensados para que solamente se haga la inversión del equipo y el uso de la app sea gratuito”, dice David López Espinoza.
Los gastos adicionales que podrían presentarse se relacionan con el pago mensual por el servicio de almacenamiento virtual, en caso de querer guardar las grabaciones de las cámaras de vigilancia y no contar con un disco duro para ello. De igual manera, la contratación de un sistema especializado de monitoreo generará un costo extra para los usuarios.
Domótica para novatos
Experimenta la tecnología , es decir, empieza por las luces de una habitación o por las cámaras de vigilancia, en vez de transformar todo junto.
Toma en cuenta que su gestión no debe resultarte compleja ni molesta. De lo contrario, no podrán emplear todos el sistema o, bien, dejarán de utilizarlo
en el hogar.
Considera que manejar o automatizar el funcionamiento de algunos aparatos puede no marcar una diferencia en tu calidad de vida, como controlar una licuadora.
No olvides que la domótica es más efectiva para crear soluciones en conjunto que para cumplir funciones individuales. Por eso, es recomendable programar
diferentes ambientes.
Integra alarmas para controlar peligros a distancia, desde robos hasta incendios.