La empresa GoPro, que contaba hasta el pasado 30 de septiembre con mil 254 empleados, decidió recortar en 20% su planilla debido a los problemas de baja demanda de productos.
La decisión llega pese a que la marca se colocó como el segundo mayor vendedor de drones,
solo por debajo de DJI, gracias a sus modelos cuyo costo iba de los 800 a los mil 100 dólares dependiendo de si venían o no con una cámara integrada.
Pero las estrictas regulaciones ambientales en Europa y Estados Unidos y la agresividad comercial, son factores que empujaron a la empresa a salir del mercado.
GoPro detalló que se retiraría del negocio de venta de drones una vez vendido el inventario con el que cuenta y aclaró que continuarán ofreciendo soporte para todas las personas que cuenten con una unidad.
Pero este no es el único tema que refleja los problemas de la empresa, en diciembre tuvo que anunciar una reducción en el precio de sus modelos GoPro HERO5 y HERO6 para poder tener un mayor impulso en ventas.
Los resultados preliminares muestran que los ingresos que la compañía tuvo en el cuarto trimestre en el 2017 fueron 340 millones de dólares, 200 millones menos que en el mismo trimestre del 2016. El impacto de esta comparación anual, que representa una caída de 37% en ventas, tuvo efecto en las acciones de la empresa que terminaron desplomándose en 20%.