México es uno de los países que registra mayores niveles de obesidad en el mundo. Son millones las personas que se hacen el propósito de mantener una mejor alimentación y hacer ejercicio para perder peso. Puede que la mayoría lo hagan con la intención de lucir mejor, pero no hay que olvidar que es un tema de salud importante. Para los que anhelan bajar kilos pero no tienen la fuerza de voluntad para dejar de comer, investigadores diseñaron una tecnología que cierra la boca.
Si la solución para bajar de peso definitivamente, y sin tanto esfuerzo, en el sentido de que no se necesitaría hacer ejercicio, es dejar de comer alimentos chatarras o postres, ¿por qué no crear un candado que cierra la boca de las personas de manera que no puedan introducir comida?
Puede sonar a tortura pero es una solución real que está proponiendo un grupo de investigadores de la Universidad de Otago, de Nueva Zelanda , y el Reino Unido. Se trata de un dispositivo llamado DentalSlim Diet Control diseñado para quienes quieren bajar de peso.
De acuerdo con la descripción de los creadores, DentalSlim evitará que la persona abra la boca más de 2 milímetros. Esto lo logra mediante un sistema que bloquea la mandíbula a través de "dispositivos magnéticos y pernos de bloqueo hechos a medida".
Básicamente el sistema DentalSlim, que debe aplicarse por un especialista dental que lo coloca en los dientes traseros superiores e inferiores, se adhiere a la mandíbula de manera que la persona se vea obligada a seguir una dieta baja en calorías y deje de comer ciertos alimentos que, simplemente, no caben en el espacio de su boca. Adiós, por ejemplo a las hamburguesas .
Sin embargo, no se trata de que la persona muera de hambre hasta alcanzar su peso ideal. Los investigadores dicen que el dispositivo permite consumir líquidos fácilmente. Además, fue diseñado para no restringir la respiración o el habla.
Pero su propuesta no es tan cruel como parecería. La persona solo tiene que soportar algunos días con el dispositivo. Los investigadores diseñaron el equipo para que después de dos o tres semanas las bisagras magnéticas comiencen a aflojarse, de manera que el usuario regrese, poco a poco, a tener una dieta más relajada.
Además, en caso de una emergencia, como un ataque de pánico o la posibilidad de asfixia, los frenillos se pueden soltar usando una herramienta especial. También se pueden instalar y quitar repetidamente según las necesidades del usuario. La idea de esta tecnología , compartieron los creadores, es evitar una cirugía costosa para reducir el peso y, en cambio, forzar el control durante un tiempo determinado con un dispositivo.
Aunque las intenciones de los investigadores son nobles, las personas que han visto esta propuesta no han reaccionado muy bien y compararon a la tecnología como un dispositivo salido de la época de la Inquisición para torturar a alguien.
Como ejemplo de ello, en Twitter , muchos usuarios no dudaron en burlarse de la propuesta que calificaron de "espeluznante" y "extraña".
Pero los creadores están defendiendo el invento, diciendo que quienes exploran la herramienta de pérdida de peso han entendido mal su intención. El investigador principal, el vicerrector profesional de Ciencias de la Salud de la Universidad de Otago, el profesor Paul Brunton, dijo que no estaba destinado a ser utilizado con fines generales de pérdida de peso, sino en casos específicos en los que existía una necesidad clínica de perder peso rápidamente.
"A veces, el primer paso para perder peso es bastante difícil ... por lo que se desarrolló con la idea de ser un tratamiento adicional que podría usarse en casos seleccionados donde sea apropiado", explicó.
Y también aseguró que los profesionales médicos le habían dado comentarios positivos, sobre todo luego de que los primeros participantes en un ensayo perdieron un promedio de 6.36 kilos en dos semanas y estaban motivados para continuar con su viaje de pérdida de peso .
"Es una alternativa no invasiva, reversible, económica y atractiva a los procedimientos quirúrgicos", finalizó Brunton.