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Poco a poco, algunas empresas en algunos países del mundo están comenzado a regresar a sus empleados a las oficinas . No obstante como la posibilidad de un contagio de Covid-19 sigue latente las reglas podrían cambiar. Esta es la perspectiva de una empresa tecnológica al respecto.
, compañía de software basado en la nube con sede en San Francisco, Estados Unidos, relató al MIT Techology Review todos los cambios que implementarán para volver al trabajo sin poner en riesgo a sus empleados .
El primer paso antes de acudir a la oficina será responder un cuestionario online en donde señalen si están experimentando algún síntoma potencial de Covid-19 o si han estado en contacto con alguien infectado.
El sistema también les asignará un horario de llegada con la intención de evitar aglomeraciones, principalmente en el elevador, en donde la compañía descubrió que los empleados podrían correr mayor riesgo .
Los empleados , además, deberán usar máscaras cuando ingresen al edificio y acudir a un espacio en donde tomarán su temperatura sin contacto. Solo entonces se les otorgará el acceso a pisos y ascensores y llegarán a un escritorio desinfectado en donde podrán quitarse el cubrebocas y comenzar a trabajar.
El sistema registra en dónde han estado y con quién, con la intención de poder alertar a quienes hayan estado en contacto con algún contagiado de coronavirus .
Vienen los cambios
El anterior es solo un ejemplo de cómo una empresa planea el regreso al trabajo en oficinas . Sin embargo, son cientos las compañías que están descubriendo cómo regresar a sus empleados de una manera segura.
Las medidas tienen que ir más allá de la desinfección . Implican poner los escritorios más espaciados, sacar sillas de la sala de conferencias, alterar los sistemas de aire acondicionado, colocar marcas en el piso y exigir protocolos de limpieza rigurosos.
En casos más estrictos se pide realizar pruebas de coronavirus a los trabajadores que regresan a la oficina y emplear sensores y otras tecnologías para garantizar que se mantengan a una distancia segura entre los empleados , por ejemplo un controlador que vibrará en caso de que dos colegas se acerquen mucho.
El éxito o el fracaso de estos experimentos en el lugar de trabajo ayudarán a determinar qué tan segura es realmente la reapertura y qué tan rápido la economía podría volver a encaminarse.
No obstante se abre un debate sobre la privacidad de los empleados pues constantemente se estarían generado datos sensibles sobre su salud. Lo que proponen hasta ahora las compañías es que, en caso de que alguien resulte positivos a Covid-19 , se informará a quienes estén en riesgo, pero no se señalará el contagiado.
Falsa sensación de seguridad
Collective Health, compañía de San Francisco que gestiona los beneficios de salud para las empresas desarrolló un producto llamado Collective Go que, entre otras cosas, incluye protocolos de salud detallados para los negocios que buscan reabrir.
Desarrollado en asociación con investigadores de Johns Hopkins, la Universidad de California, San Francisco y otros lugares, las pautas incluyen cuándo y con qué frecuencia se debe evaluar a los trabajadores en varios tipos de trabajo y ubicaciones.
Y es que su modelado encontró que la detección de síntomas y temperatura por sí sola deja un 90% de posibilidades de brotes en el lugar de trabajo , mientras que el uso de máscaras , distanciamiento social, pruebas de rutina y otras medidas lo empujó por debajo del 5%.
