A pesar de que las vacunas contra Covid-19 han comenzado a aplicarse en todo el mundo, la realidad es que todavía estamos lejos de terminar con la emergencia. Aún faltan millones de dosis para que la humanidad esté protegida. Basta con señalar que, en la mayoría de los países, por ahora solo están considerando a los adultos mayores, dejando a la población de menor edad en riesgo de contagio . Es por ello que la tecnología diseñada para detectar la enfermedad es tan valiosa, y un brazalete equipado con Inteligencia Artificial, ha recibido la aprobación de uso.
Hay que señalar que uno de los puntos que más ha preocupado a las autoridades del mundo es que, en la mayoría de los casos, los primeros síntomas de Covid-19 se presentan días después de que las personas contrajeron la enfermedad, por lo que pudieron haber contagiado a otros a su alrededor sin saberlo. Lo mismo sucede con los asintomáticos que sí pueden propagar el virus aunque no se sientan mal.
Por lo anterior es que se ha hecho tan relevante contar con sistemas que sean capaces de detectar la enfermedad desde el principio para que las personas se aíslen. Pero, desafortunadamente hay quien busca aprovecharse del miedo y promocionan métodos que no son efectivos. Es por ello que las autoridades sanitarias se han dado a la tarea de estudiar y comprobar la efectividad de algunos productos.
En el caso de Estados Unidos, la Administración de Medicamentos y Alimentos ( FDA ) ha aprobado una serie de avances contra la Covid-19 como parte de la lucha en curso contra el virus. Una de las últimas herramientas que obtuvo la autorización de esta agencia es el primer dispositivo de detección basado en inteligencia artificial ( IA ) diseñado para identificar signos de la enfermedad en las personas asintomáticas.
Bajo el nombre el Tiger Tech Covid Plus Monitor, el aparato es un brazalete que, a través de sensores de luz y un pequeño procesador de computadora, ha sido diseñado para buscar biomarcadores del virus, como la hipercoagulación, una anomalía común en pacientes con Covid-19 que hace que la sangre se coagule más fácilmente.
Básicamente lo que hace este dispositivo es que, una vez que se amarra al brazo de una persona, los sensores integrados del monitor comienzan a recolectar señales de pulso del flujo sanguíneo durante un período de tres a cinco minutos. Luego, el procesador extrae la información clave de las mediciones y utiliza para alimentar el modelo de aprendizaje automático.
Para hacer sencilla la lectura, los resultados finales se muestran a través de una serie de luces de diferentes colores. Así la persona puede saber si dio positivo, negativo o si la prueba no es concluyente.
Precauciones
A pesar de haber recibido la aprobación de la FDA, la misma agencia destaca en su anuncio que el brazalete no está diseñado para diagnosticar Covid-19 y, por lo tanto, no debe sustituir una prueba regular.
¿Entonces para qué sirve? De acuerdo con la administración de Estados Unidos, en realidad este dispositivo está pensado como una medida más de seguridad para d etectar posibles signos. Es decir, podrá ser utilizada como una precaución adicional junto con la verificación de temperatura. De esta manera, si la lectura no indica fiebre, pero la persona es asintomática, se contará con un nuevo indicador para, por ejemplo, restringirle el acceso a un espacio público como escuelas, lugares de trabajo, parques temáticos, estadios y aeropuertos, al menos hasta que se haga una prueba completa.
La autorización de esta tecnología sigue a estudios clínicos en hospitales y escuelas que mostraron resultados similares. En el entorno hospitalario, el dispositivo detectó correctamente los biomarcadores Covid-19 en una tasa del 98.6%, al tiempo que identificaba con precisión aquellos que no poseían los signos reveladores a una tasa del 94.5%.