Ni Nuño ni Videgaray calcularon las razones por las que Aguirre no ha respondido por los hechos del 26 y 27 de septiembre de 2014: que su red de complicidades, tejidas durante más de 30 años como parte del PRI profundo, permitiría que sus crímenes no lo hundieran, sino que, al revés, lo protegieran

Reiterados informes dan cuenta hoy que la PGR se halla lastrada por su falta de autonomía e independencia; por ineficacia operativa ante la impunidad dominante, y por una corrupción interna cada vez más grave. El deterioro se ha ahondado sin importar si en Los Pinos ha despachado un priísta o un panista