Un alud de amparos, algunos de los cuales impugnan bárbaramente el texto mismo de la Constitución, ha caído sobre los juzgados de distrito para tratar de impedir la “aplicación” de la nueva Ley de Remuneraciones, la cual había estado congelada durante seis años.

La Suprema Corte de Justicia de la Nación ordenó suspender la aplicación de la Ley Federal de Remuneraciones, que establece que nadie puede ganar más que el Presidente, para que la Cámara de Diputados elabore el Presupuesto de Egresos de la Federación 2019, como lo hizo cuando aprobó el del 2018