Los habitantes cercanos al Lago de Texcoco dicen que este gran vaso lacustre no debe morir, que debe ser rescatado por su importancia ecológica y su cercanía a la capital. Hoy recuerdan poco de él, de cuando sus abuelos decían que los patos abundaban aquí

Hasta el siglo XIX, el espacio por donde atraviesa la Calzada Ignacio Zaragoza fue el lago de Texcoco, tras su desecación comenzó la historia de esta importante vía. En la actualidad no es extraño que las fuertes lluvias provoquen severas inundaciones en esta zona