Víctor Hugo no parece dudar en llamar a Nuestra Señora de París “una inmensa sinfonía de piedra, por decirlo así, de un hombre y de un pueblo...”
Necrópolis
Los cementerios ya no parecen necesarios y en las ciudades ya no hay tierra tampoco para los muertos...
Hasta su muerte le fue fiel a su piano Börsendorfer, con cuya ayuda compuso casi toda su obra.
“La verandah es el punto fronterizo, por así decirlo, entre la civilización y la naturaleza, entre la ciencia y la magia, entre el ‘progreso’ y la ‘barbarie’. La verandah es el ámbito ideal de dos formas de expresión de la literatura inglesa como lo son la conversación o la nostalgia...”
En su escritura pueden reconocerse las formas claras, sin elusiones ni artificios, lúdicas, prestas a los juegos de palabras que mantenía en su conversación, que no dejaba de prolongarse días y noches en cantinas y en tugurios y en su casa...
No parece menos insólito que, más que como una ocurrencia al uso, el nombre de Kafka siga propiciando derivaciones en el habla cotidiana
Tormentas solares
El solo nombre de Tormentas solares resulta incitante y puede su-gerir creaciones posibles: quizá Sor Juana Inés de la Cruz hubiera podido escribir un soneto...
Ojo de agua
Desde lo que creemos la antigüedad, el agua, en sus diversas formas, no ha dejado de determinar el devenir de la tierra...
Quizá el principio de la biografía de Olaf Christiansen puede hallarse después de la Segunda Guerra Mundial en la Central Camionera del entonces Distrito Federal donde abordó un camión con destino a Tijuana