Dos personas con familiares contagiados con el coronavirus (covid-19) compartieron con la BBC las dificultades de conseguir una cama en un hospital de Wuhan y lo doloroso de ver morir a un ser querido que no recibió la atención apropiada
Personal médico del Ejército de Liberación Popular llegaba a Wuhan para asistir a los abrumados trabajadores sanitarios y gestionar el nuevo hospital, situado en una zona rural lejos del centro de la ciudad. Sus unidades prefabricadas, a donde empezaron a llegar los pacientes al final de la mañana, contaban con equipamientos y sistemas de ventilación de última tecnología