Se guía a la piara humana hacia la anti-reflexión, al consumo de la pastura artificial, a la tecnología —como finalidad ética, no como herramienta— y a la comunicación vana

Establecer una guerra entre buenos y malos, entre oprimidos y opresores, y reducir nuestra actualidad a ser consecuencia de aquellos relatos, no es más que un ardid simplista

Quien lee no puede hacerlo en nombre de otros: sus heridas o disfrute le pertenecen y le es imposible ir más allá de relatar su propia experiencia