Una cosa que influye para que el poder absoluto sea nefasto es que los soberanos autócratas, o dicta-dores que tienen el poder absolu-to, son grandes egoístas que prefieren la satisfacción de su pasión de mando al bien de su Patria”.

Al regresar a tierra, ambos fueron llenados de vítores y felicitaciones. Algo contrastaba entre el prodigio técnico que se atestiguó y nuestra condición posrevolucionaria