José Ángel Leyva es poeta, quizá por eso nos ofrece un libro cálido, lleno de cariño por las personas que señala. Digamos que escribe desde el fondo de sí mismo
Te daba gusto conversar. Lo más aleccionador es que jamás el tema eras tú. El mundo está lleno de cosas y de eso te gustaba platicar...
Una buena novela sólo se consigue con una profunda creencia en sí mismo, y Pérez-Reverte lo deja muy claro
¿Tienes que atacar a un periodista de esa manera?, ¿lo disfrutas?, ¿lo comparas como cuando decías a tu gente: ¡A los pozos! Y eras una promesa en el PRI?
Beridze es lectora desde muy joven de Ajmátova, reconoce que su generación fue marcada por los versos, sobre todo los amorosos, de su primer libro, La Tarde
El pueblo se llama Tecate y se encuentra en Baja California, al lado de La Rumorosa y bajo la protección de El Cuchumá, la montaña sagrada. Es un paraíso, dicen, y así debe ser porque estar allí induce a pensar en una biblioteca y en una botella de vino. Tecate es un pueblo multicolor, rodeado de “piedras blancas como huevos de dinosario”, diría García Márquez. Una comunidad mágica donde los recuerdos flotan y sus habitantes sonríen. Alfonso Caballero narra infinidad de momentos donde queda cla
El clamor de los bosques
Sería útil que los representantes que elegimos para las Cámaras la leyeran y reflexionaran sobre leyes de protección a los bosques...
No faltaba el desconfiado que cuestionaba la botella, y Vicente le servía un trago y el bato gritaba que era real, y que Vicente era hombre, no pedazo
Es fuerte lo que expresa Sergio Ramírez, y usted lo podrá comparar con lo que está pasando en el CIDE o las declara-ciones contra la UNAM
Aguilar Camín, sin trucos literarios, nos introduce en una historia de antes del terremoto que compartimos con singular alegría, ¿qué terremoto? Ya lo verán