Expertos e integrantes de la comunidad del Centro de Investigación y Docencia Económicas analizan la crisis que vive esta institución, enmarcada en la reforma a su estatuto y la designación de un nuevo director; subrayan el derecho a la libertad de cátedra y la defensa del Centro para evitar un retroceso en el camino recorrido a favor de la autonomía de pensar, investigar, crear y educar