Los tres gobernadores dejan deudas y pobres resultados en salud, educación, empleo e infraestructura; en seguridad, una descomposición que se expresa en el contubernio de policías con bandas criminales, como en Veracruz.

La CIDH es una instancia incómoda que tiene a su cargo la difícil tarea de denunciar abusos de los Estados que la financian