San Petersburgo.— Además de jugar por el tercer lugar, hay algo más que se disputarán ingleses y belgas este día en la cancha: El título de goleo individual.
La competencia va así: Harry Kane lleva seis tantos. Le marcó dos a Túnez, tres a Panamá y uno más a Colombia.
Quien le sigue es Romelu Lukaku, con cuatro anotaciones (dos a Panamá y dos a Túnez).
La distancia no es imposible de alcanzar o mantener.
“Y vamos a tratar de ayudarlo”, dice Gareth Southgate, técnico de Inglaterra. “Harry se ha comportado como un gran capitán del equipo, como un gran líder. Si podemos hacer que se corone, lo vamos a realizar”.
Kane descansó en el último juego de la fase de grupos, cuando Inglaterra perdió precisamente con Bélgica. “Fue difícil para él no jugar ese partido. Estaba dispuesto, pero había que cuidarlo de algunos golpes. Quién sabe qué hubiera pasado en ese partido si hubiera estado ahí”, agrega el técnico de los británicos.
Del otro lado del campo, Roberto Martínez es más frío en ese aspecto. Su equipo no está para logros individuales, todo es por y para el conjunto.
“¿Que si vamos a ayudar a Lukaku?”, pregunta, y de inmediato responde: “Uno no mira el trofeo individual que él puede ganar, que tiene mucho mérito, eso sí, pero él está aquí para ayudar al equipo, no por un premio individual. El futbol es un juego en conjunto, ganan y pierden todos. Si se da algo, será por la consecuencia de que hicimos las cosas bien”.
En la historia de los campeones de goleo de la Copa del Mundo, Inglaterra tiene uno: Gary Lineker, quien en México 1986 se llevó los honores, con seis anotaciones. Bélgica no ha logrado ganar ese título. De hecho, Lukaku es quien más goles ha marcado para ese representativo en un Mundial, por lo que ya hizo historia.