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Moscú.— Semifinal inédita. Ingleses y croatas se enfrentan. Un equipo tradicional, muy tradicionalista contra uno joven que trata de construir su propia historia.
“Estamos listos para escribir nuestra propia historia. Tratamos de quitarnos de la mente todo eso de lo que se habla en el pasado. Queremos entrar en las páginas de gloria del futbol inglés, pero para eso hay que enfrentarnos ante un gran equipo como Croacia. Será una gran prueba física”.
El equipo inglés es joven, ha trabajado unido mucho tiempo, y a eso se aferra en las semifinales de la Copa del Mundo. “Son extrañas las sensaciones que tenemos. Mis jugadores son jóvenes, pero saben que deben entregarse, porque son embajadores de su país. Somos jóvenes, pero no por eso estamos en desventaja. La experiencia se gana intentando”, sostiene.
Southgate asegura que encontrarse a Croacia a estas alturas “no es una sorpresa.
Tiene increíbles jugadores que saben jugar su método y nosotros trataremos de hacer el nuestro, y si tenemos que cambiar los planes lo haremos, los muchachos son muy perceptivos. Nuestra continuidad es la que nos ha dado ciertos logros”.
“Los muchachos deben disfrutar el partido”, dice, “no tenemos razones para estar nerviosos ni para sentirnos bajo presión”.
Se nota muy confiado, frío, tal y como es su raza. Está seguro de que sus futbolistas no lo van a defraudar: “Los jugadores croatas de ahora están mostrando sus cualidades, del mismo modo que lo estaban haciendo en sus clubes, porque algunos de ellos juegan en grandes equipos como el Real Madrid (Luka Modric), el Barcelona (Ivan Rakitic) o Juventus (Mario Mandzukic)”.
Para Dalic, sus futbolistas jóvenes deben aferrarse a muchas cuestiones para ganar el juego ante los ingleses, como pensar en la gente que los ve y los espera en su nación: “Creo que lo más importante es el orgullo mostrado, hay un mar de emociones; hoy prevalece un sentimiento nacional por hacer feliz a un pueblo pequeño de cuatro millones de compatriotas”.
Todas las miradas y las esperanzas del equipo están en el mediocampista Luka Modric, su estrella, quien quizá esté jugando su última Copa del Mundo. “Modric es un gran jugador, cuenta con calidad y liderazgo.
Los compañeros siempre esperan que haga algo. Con él, todo es posible. Sí, puede ser su último Mundial, y qué bueno que estemos en semifinales. Luka está jugando el mejor futbol de su vida, pero todos los jugadores se están esforzando mucho, tienen el mismo mérito que él”, concluye.