Dos realidades. En la semana asumieron los cargos en sus respectivas entidades Alejandro Armenta y Pablo Lemus. El primero, arropado por el centro, acudieron personalidades, Ministras del Alto Tribunal, Secretarios, Gobernadores, coordinadores legislativos, el Presidente del Senado, desde luego la dirigencia partidista y sus aliados, solo hizo falta la mandataria Sheinbaum. Contrario el segundo, siguiendo su propio estilo, mediático, las luminarias se las llevaron los deportistas y artistas, con una limitada y fría presencia del establishment federal.
El origen del poblano es el esfuerzo, le tocó el rigor del viejo priismo de formas, conoce el peso de las jerarquías y lo muestra, llegó y tomó el mando, sin interferencias de antaño, su carrera ha sido lo público, sabe de acuerdos, es habilidoso. El nuevo ejecutivo jalisciense es un hombre carismático, afable, visionario, comerciante de ascendencia y empresario por decisión, pero no político. La herencia legada por Alfaro pesó. Sus bravuconadas molestaron el ánimo de los que disponen y se notó en el presupuesto. Para colmo, el inaugurado gabinete parece cooptado por su antecesor. En voz del ‘Jefe Diego’ se diría que es un ‘buen chico’, sin embargo, su agrado poco ayuda en parajes en los que reinan lobos.
La ausencia de artes en el manejo de lo que a todos interesa se nota, la zona metropolitana de Guadalajara evidencia décadas de rezago, sus avenidas cimentadas en los sesenta son insuficientes, transitar a cualquier hora es un suplicio, no hay obra, al igual que la inmensa generalidad de las provincias, depende de la hacienda nacional, tan es así que en los temas sensibles se estancó. La región camotera es otra, el último sexenio recibió enormes apoyos, su infraestructura creció, si bien el asunto de seguridad cala en nada se asemeja a lo que padecen los tapatíos, los del ‘Popo’ cuentan con mayor respaldo de las fuerzas policiales y viven en un clima de relativo confort.
La ‘Perla de Occidente’ quedó a la zaga, Monterrey, San Luis Potosí, Querétaro o Aguascalientes, ofrecen servicios superiores e incluso la han desplazado como opción de inversión. El discurso amenazador de dejar el pacto fiscal no tuvo ni pies ni cabeza y al ‘chamaco’ provocador lo abandonaron y con ello a sus ciudadanos. Lo peor viene en los próximos años. Los de la tierra del tequila, navegarán en la indiferencia, el dinero les caerá a gotero y lo que se haga vendrá de mano de quien tiene el control de la llave de los recursos.
Los naranjas tenían mejores alternativas, optar por simpatía en lugar de experiencia es el precio que pagará la población.
El pronóstico es complejo, los morenos recelosos, están agraviados por el cerrado proceso local y lo harán sentir, en los recientes hechos se afirmó. Aplastarán a los ajenos. Se requerirá de pericias para reconstruir el deteriorado nexo del entendimiento que la 4T se niega a abrir. Pronto someterán a los poderes judiciales, su palabra será ley alejada de la medida y equilibrios.
Es una conquista planeada, dura, en la que la República se diluye frente a una oposición ocurrente, desdibujada, con seductores pero sin estadistas.
Abogado