Por: Elisangela Escobar Arandia
El trabajo que desarrollamos en el Laboratorio de Innovación en Seguridad Ciudadana (LISC) en el pueblo de Santa Fe una de las preguntas importantes que surgen es ¿Qué mecanismos de supervivencia han desarrollado las y los pobladores para hacer frente a estas violencias? Es importante señalar que las personas habitantes del pueblo de Santa Fe tienen dos características generales principales: la resiliencia y la fortaleza. La resiliencia hacía las transformaciones que han afectado el pueblo es un factor de la supervivencia cotidiana por parte de las y los habitantes de todas las edades. En segunda instancia resaltamos la fortaleza es importante para la permanencia de los aspectos culturales y de convivencia que han logrado mantener como pueblo.
Aunque la resiliencia y la fortaleza pueden leerse de forma contradictoria, no son excluyentes, ya que ambos son mecanismos de supervivencia que se aplican todos los días por parte de las y los habitantes del pueblo de Santa Fe y de muchas personas que habitan la ciudad. También, varias vecinas y vecinos se organizan para enfrentar los problemas que aquejan al pueblo como lo son la contaminación del río, la basura, la delincuencia y la recuperación de espacios públicos.
Pero, ¿qué podemos hacer como organismos e instituciones para apoyar estas prácticas prometedoras para reducir las violencias, mejorar la calidad de vida y seguridad?
Desde el LISC generamos canales de escucha activa para conocer las percepciones de las y los habitantes del pueblo de Santa Fe sobre cómo ven el lugar en el que viven, qué problemas tenían antes y qué problemas tienen ahora con los cambios que han surgido a través de la dinámica social, económica y cultural.
Consideramos que es muy importante destacar el hecho de que estos proyectos en trabajo con la comunidad se retomaron como una herramienta para la generación de cambio.
En cuanto podemos referirnos a la incidencia y cambios de comportamiento, las herramientas de trabajo y gestión comunitaria para el cambio logran que se ponga a debate en el fuero político para la generación de políticas públicas y reformas de ley que ayuden en la regulación de las grandes problemáticas como lo son las violencias y la inseguridad.
Son muchas las cosas que hemos aprendido del pueblo de Santa Fe y de su historia. Lo reconocemos, reconstruimos y resignificamos a través de las vivencias de sus habitantes.
Recuperar las redes de apoyo que son una forma comunitaria de desarrollar diversas iniciativas que siguen siendo parte de la cotidianidad de personas que habitan en lugares como el pueblo de Santa Fe.
Las instituciones y organizaciones debemos tener un acercamiento aperturado hacía las comunidades para lograr conocer los lugares y las personas que los habitan y, de ese modo, analizar las necesidades prioritarias y poder generar alternativas que coadyuven en el mejoramiento de ciertos aspectos problemáticos de los lugares en los cuales trabajamos.
El trabajo comunitario con incidencia para la recuperación del enfoque del tejido social implica que la violencia social y política es entendida como un fenómeno muy complejo que emerge de la intersección de muchos factores.
Por lo cual, el LISC ve el enfoque de la recuperación del tejido social mediante la gestión del cambio como una oportunidad para abrir espacios comunicacionales en los cuales las personas puedan construir colectivamente vínculos entre ellas basados en el respeto mutuo, la solidaridad y el disfrute colectivo de los espacios públicos mediante la aplicación de prácticas prometedoras para la reducción y prevención de las violencias.
Programa de Seguridad Ciudadana.
