La fuerza de la justicia está sin duda en nuestros marcos normativos, nuestra sólida estructura, infraestructura y mejoras tecnológicas, en la coordinación institucional, las capacidades operativas, tácticas y estratégicas, pero sobre todo en el trabajo que cada servidora y servidor público de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México realiza día con día.
La procuración de justicia es un esfuerzo colectivo que involucra a quienes atienden a las víctimas, construyen expedientes sólidos, investigan delitos y colaboran en el seguimiento de todas y cada una de las diligencias que nos permite reconocernos como una Fiscalía emblema para el país e incluso el continente. Es también un esfuerzo que incluye al personal administrativo, técnico y auxiliar, quienes aseguran que las operaciones fluyan de manera adecuada y se cumplan los objetivos institucionales.
El papel de quienes forman parte de esta honorable institución es determinante para enfrentar los retos que la Ciudad de México nos presenta. A través de su desempeño, logran avanzar en la búsqueda de justicia para quienes han sido víctimas; se promueve la restauración integral del daño y se contribuye a prevenir futuros hechos delictivos. Reconocer la labor de cada persona que integra esta Fiscalía no es solo un acto de gratitud, sino una afirmación de su relevancia en el funcionamiento de este sistema de justicia.
Este balance también sería incompleto si no reconociéramos los cimientos sobre los cuales se ha consolidado la Fiscalía en los últimos años, y en este sentido no quiero dejar de mencionar el ejemplar esfuerzo de la anterior fiscal, Ernestina Godoy, que, con su liderazgo y mirada profundamente humana, estableció bases firmes que nos han permitido continuar fortaleciendo esta institución.
En este último día del año, reafirmamos nuestro compromiso con la justicia y con la ciudadanía. Estoy seguro de que se seguirá trabajando para consolidar una institución que responda a las necesidades de la gente, que actúe con perspectiva de género, que respete los derechos humanos y que sobre todo, sea digna de la confianza depositada por la sociedad.
La fuerza de la justicia está en ustedes, las personas que hacen posible que ésta también forme parte de la profunda transformación que comenzó hace más de 100 años y que hoy en día continúa, de manera más reciente a través de dos hitos importantes: la implementación del tan necesario nuevo modelo del sistema penal acusatorio y posteriormente nuestra conversión a Fiscalía.
Hace ya 5 años que llegamos con la licenciada Ernestina Godoy. Tengo la certeza de que dejamos una institución sólida, renovada, cada vez más digna para las y los usuarios, pero también para sus trabajadores. La necesidad de acercar la justicia a las personas nos llevó a salir a las calles, hablar con la gente y brindar la confianza de que cuentan con una Fiscalía diferente. Tengo la satisfacción del deber cumplido y seguiremos trabajando por las causas más profundas del pueblo mexicano, en la capital, la zona metropolitana y el país.
El camino que sigue por delante es largo y exige un esfuerzo colectivo. No hay espacio para la autocomplacencia, pero sí para reconocer lo que hemos logrado juntos. El 2025 será un nuevo capítulo en esta historia compartida, uno que afrontaremos con la misma determinación y esperanza que nos ha traído hasta aquí.
Encargado del despacho FGJ-CDMX