"¿Aún tienes menores entre 5 y 11 años de edad sin vacunar? ¡Te esperamos", se lee en un anuncio de la Jornada de Vacunación contra el Covid-19 del Gobierno de México -sí, el Gobierno de México- pero en el consulado de El Paso, Texas. Esto, contrario a las recomendaciones que en territorio nacional hacen los funcionarios de Salud. "Los niños se curan con Vapo Rub".... "no son recomendables las vacunas para ellos".
¿Por qué en los consulados no solo de Texas, sino de Arizona, Florida, California y otros estados más los servidores públicos -pagados igual por la administración federal- llaman a inmunizar a los pequeños?
Es verdad que la Organización Mundial de la Salud ( OMS ) ha señalado que la prioridad deben ser los adultos mayores y que hay países donde no se han cubierto importantes porcentajes de población, pero también es verdad que las naciones desarrolladas optaron la inoculación a pequeños al no haber estudios contra ello.
Pero en México una vez más decidió dejar a un grupo de población para después; una vez más se decidió – y esto es en broma y en serio- estar más lejos de Dinamarca, contrario a lo que prometió el Presidente Andrés Manuel López Obrador al llegar al poder. El país danés anunció el pasado 30 de noviembre la decisión de llamar a vacunar a niños entre 5 y 11 años para frenar la cadena de contagios. “El aumento de la infección entre los niños también conduce a un aumento de Covid-19 entre el resto de la población y aumenta la presión sobre un sistema hospitalario ya sobrecargado”, señaló en un comunicado oficial el gobierno de ese país.
La determinación de dejar fuera del esquema de vacunas a los menores genera dos problemas: uno, que éstos trasmiten de nuevo el virus a sus padres y abuelos, como se señala en el documento y como coinciden los especialistas y, dos, que los pequeños también sufren secuelas, consecuencias y han muerto por este mal. ¿Por qué negarles su cobertura?
Este jueves 6 de enero en Opinión 51( www.opinion51.com ) , la plataforma de mujeres columnistas , decidimos publicar una edición especial en la que nueve plumas describieron algunos casos reales de niños infectados y datos novedosos sobre Covid-19 e infancia.
Ivabelle Arroyo
( https://www.opinion51.com/p/ivabelle-arroyo-covid-en-la-infancia ) entrevistó al doctor Guillermo Yanowsky, del Hospital Civil de Guadalajara, donde solo en 2021 internaron a 151 niños con infección del nuevo coronavirus. Algunos llegan a presentar síndrome inflamatorio multisistémico, daños en pulmones y neumonía; afectaciones de tipo cardiaco, en riñones y consecuencias reumatológicas. “Tuvimos menores hospitalizados que tuvieron secuelas neurológicas, como si tuvieran una enfermedad cardiovascular”.
Karla Iberia Sánchez
( https://www.opinion51.com/p/karla-iberia-sanchez-secuelas-primera-nina ) escribió también en esta entrega sobre el caso de Andrea, la primera niña hospitalizada por Covid-19 en México, quien ahora con 12 años vive con secuelas psicológicas al grado de no querer quitarse el cubrebocas. ¿Es justo que se le niegue una vacuna?
Con el incremento de niños contagiados “inicia la siguiente historia, las secuelas, pues hay niños que quedan con migrañas o dolores musculares”, señala Regina Reyes Heroles ( https://www.opinion51.com/p/regina-reyesheroles-covid-ninos-secuelas ) en Opinión 51 tras consultar a un médico estudioso del tema.
Pude conversar con algunas autoridades consulares sobre las campañas que llevan a cabo para vacunar a niños mexicanos en Estados Unidos , y coincidieron en que ellos prefirieron sujetarse a las normas y recomendaciones locales, además de que las vacunas son compradas con dinero de las autoridades de ese país y las jornadas organizadas por asociaciones civiles que solo han pedido la ayuda de sus oficinas para la promoción.
Esto es entendible. El sentido común siempre debe apuntar al bien mayor, y en este caso es proteger a la infancia mexicana y a la familia al eliminar la transmisión.
¿Qué parte de esta sensibilidad e intuición falla en el gobierno federal mexicano?