Los seis estados concentradores de la mitad de los homicidios tienen gobernantes de la coalición dominante encabezada por Morena, de la oposición panista, así como de MC: ¿vamos a continuar asumiendo evasivamente la supuesta carencia de responsabilidad de gobiernos estatales?
Propongo esa pregunta dada la relevancia del debate de este domingo, el último de una serie de tres donde, como ocurrió con la capital nacional, contaremos con un insumo electoral reservado para discutir —presentar una hibridación de propuestas, ataques y gráficas de argumento o fotografías presuntamente inculpatorias— del tema de la seguridad por quienes serán, de un lado, los opositores a ser derrotados y las ganadoras para gobernar, según las encuestas.
El informe mensual presentado por la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, precisa a Guanajuato, Baja California, Estado de México, Chihuahua, Jalisco y Morelos como las entidades donde ocurrió el 45.9 por ciento de los homicidios dolosos. El debate no puede resolver, ni busca hacerlo, la incógnita de la política pública indispensable para disminuirlos a grados semejantes de la comunidad internacional en tasa por cien mil: México es negativamente superado por once naciones o grupos de islas en registro de homicidios.
Solamente la convergencia de un gigantesco esfuerzo institucional, ciudadano, empresarial, de la diversidad de los organismos de la sociedad civil y una capacidad operativa estratégicamente colocada en un nuevo enfoque podrá avanzar en la materia. Y hay que definir cuál es el rol del gobierno de Estados Unidos y de los grupos organizados con alto potencial de fuego dispuestos a pelear su territorio delincuencial.
Se entreabre una oportunidad histórica de coordinación regional en el centro del paìs con Delfina Gómez, Clara Brugada, y Margarita González y con una nueva perspectiva nacional e internacional con la experiencia de Claudia Sheinbaum.
De las cuatro administraciones presidenciales de este milenio, solo la de Andrés Manuel López Obrador ha tenido una tendencia sostenida a la baja y la mayor disminución en homicidios dolosos en su promedio diario. En la CDMX, AMLO, Marcelo Ebrard y Sheinbaum lograron disminuciones. Solamente Miguel Ángel Mancera, otra vez candidato de la oposición, registró negativos generalizados en seguridad, paradójicamente, una condición de la profunda mejora registrada en la capital nacional ahora gobernada por Martí Batres: estaba tan mal que se pudo hacer mucho y a una velocidad inédita en el mundo.
Sheinbaum cuestionó en Tlajomulco: “¿Cómo va a haber seguridad en Jalisco, si no hay coordinación con la federación?”. Si la coordinación existiera entre las fuerzas políticas vencidas y vencedoras, un escenario distinto se abriría ante la nación.
El debate es útil para afinar percepción respecto de las personas contendientes. La ejecución de la política y su mediación pública es otro mundo.