Las Rayadas son campeonas del futbol mexicano femenil. Fue una final inédita, con sorpresas, jugadas mágicas, con Itzel Velasco maravillosa en la portería, pero Pamela Tajonar no se quedó atrás.

Una final más que pierde el América de Ángel Villacampa, pese a que tenía el marcador en su favor con el gol de Sarah Luebbert.

Por las Rayadas, la capitana Rebeca Bernal y Diana García aparecían varias veces por las bandas, pero poco hizo Christina Burkenroad. Lo intentó más Jermaine Seoposenwe, pero hasta ahí.

Sacaron a Katty Martínez, pero no debió haber salido en el momento crucial.

Fue un gran escenario, el Gigante de Acero, con colorido y luces espectaculares. Mejor lugar no existió para la gran final, y nadie quería estar en otro sitio.

El clímax llegó con una falta del Monterrey, tarjeta amarilla para Samantha Simental.

Polémica jugada dentro del área, mano de Aurelie Kaci, de las Águilas. Se fue a checar al VAR, y la árbitra Francia González marcó la pena máxima, en el último segundo del último minuto de juego.

Algarabía total en el inmueble. Bernal tenía la oportunidad de marcar el gol del empate, que las llevaría a los penaltis.

Ante todo México, con toda la presión en su hombros, pero todo estaba en su favor.

El nerviosismo a flor de piel, y marcó el gol. Se empató de manera legítima, y a la tanda de penaltis. Nadie se quería perder este momento mágico.

Las encargadas de las norteñas fueron Yamilé Franco, Rebe Bernal, Ana Martínez (falló), Merel van Dongen y Valeria del Campo. Por parte de las azulcrema, Kimberly Rodríguez la metió, pero Karen Luna no, y se ponía aún más cardiaco el asunto. Kiana Palacios lo marcó perfecto, Andrea Pereira también.

A mi parecer, Aylín Aviléz nunca debió ejecutar el último, pero a la ex de las Rayadas le tocó el penalti decisivo y —con rechifla del público— lo falló.

Todo el estadio reventó, las jugadoras no lo podían creer, el universo conspiraba en favor de las de la Sultana del Norte. Es su tercera estrella, estrellota.

Otra vez, para un equipo del norte. Primera temporada de Amelia Valverde en México. La técnica costarricense logró el campeonato con un juego vistoso, con la defensa impecable, para que las volantes ofensivas y delanteras pudieran hacer libremente su trabajo.

Así se cierra un capítulo más, con el juego más espectacular que hemos visto en los últimos tiempos. ¡Felicidades, Monterrey!

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