Juan José Rodríguez Prats es uno de los últimos representantes de aquella clase de políticos intelectualizados que caracterizaron lo mejor de la política mexicana en el siglo XX. Un hombre que siempre ha considerado la actividad política como una extensión de la cultura. Orador y tribuno notable, apasionado polemista y con más de cincuenta años de experiencia política a sus espaldas sin señalamientos de corrupción. Rodríguez Prats ha sido diputado, senador y autor de libros imprescindibles como El poder presidencial, su biografía del presidente Ruíz Cortines, sus obras sobre el PAN y Cartas a un joven político. Es el exponente contemporáneo más destacado de la ideología panista y un intelectual público incisivo en sus críticas a su propio partido.
1.- Usted empieza su más reciente artículo periodístico con una cita de Luis Fernando Bernal “ese partido (el PAN) ya no existe. Se quedaron con las siglas y el registro ante el INE, es decir, solo la marca sobrevive.” Son palabras muy duras…
Respuesta
. Si el PAN pierde su capacidad autocrítica, deja de ser el PAN. De ninguna manera podía perderse cuando dejó de ser oposición y se convirtió en poder, al contrario, tenía que acentuarse. Es fácil desde la oposición criticar y ser congruente. El reto es hacerlo desde el poder. José González Torres, un presidente del partido con acendrada convicción católica, funcionario importante de organismos mundiales clericales, decía que el PAN no debería arribar al poder porque se iba a parecer al PRI. Es decir, el PAN debería ser conciencia crítica, un muro de contención a los abusos del PRI en el poder. Christlieb sostuvo un debate con él porque decía que el PAN sí debía tener vocación de poder. Con Christlieb comienza la vocación de poder. Del 1929 a 1962 el PAN había tenido 17 triunfos municipales. De 1962 a 1969, tuvo 17 triunfos (período Christlieb). En 67 ganaron Mérida y Hermosillo. Se asustó el gobierno. Díaz Ordaz se había comprometido a respetar triunfos electorales del PAN… y en 1970 hubo fraude electoral de Loret de Mola contra Víctor Correa en Yucatán. Ahí vino la discusión de retirar la candidatura presidencial de Efraín González Morfín. Triunfó la opción de participar. En todo partido debe cotejarse diariamente lo que dice frente a lo que hace. Principios frente a realidad. Alonso Lujambio decía que hay 3 clases de líderes: los que no tienen principios y duermen a pierna suelta, los que teniendo principios no los cotejan con la realidad y duermen a pierna suelta, y los que al final del día cotejan lo que hicieron con principios y no concilian el sueño. De ese tipo de líderes requerimos. Esa es la función de quienes conocen la doctrina, y es lo que hace Luis Fernando Bernal. Dado lo que hace la dirigencia de Marko Cortés, pues riñe con la tradición democrática del PAN. El discurso no puede ser más pobre.
2.-Usted atribuye, cronológicamente, el primer quiebre en el PAN al sexenio del presidente Calderón cuando éste solicitó la renuncia de Manuel Espino a la presidencia del partido. ¿Porqué?
Respuesta
. El PRI surgió en 1929 desde el poder. Calles convoca a crear un partido. El PAN surgió 10 años después desde la ciudadanía. Esto lo dice Krauze, no necesariamente contra el gobierno, pero sin apoyo del gobierno. Es una cualidad que solo tienen el PAN y el Partido Comunista en toda la historia de México. Los otros partidos o se segregaron del partido en el poder o los patrocinó el gobierno. El PAN criticó al PRI siempre como el partido de estado, algo frecuente en el discurso panista y cuál sería la ironía de la historia que cuando toma posesión Calderón, hace lo que el PAN criticó en el PRI y dice aquí mando yo. Y entonces viene propiciar la salida de Espino e imponer a Germán Martínez. Ante la renuncia de Martínez, todavía impone a César Nava. En sus respectivas elecciones internas eran candidatos únicos. La tercera ocasión que Calderón intentó imponer presidente ya no pudo colocar a Roberto Gil y ganó la militancia con Gustavo Madero, quien luego nos decepcionó, pero ya alguien se atrevió a postularse frente a las imposiciones de Calderón. Por eso señalo que ése fue un punto de quiebre. Que conste que Vicente Fox no lo hizo sin tener la vestimenta de panista de Felipe, con él si prevaleció la distinción entre partido y gobierno. Esta distinción no la hemos entendido en México porque es el mismo caso hoy con Morena y lo fue con Peña Nieto. Es uno de los grandes problemas de nuestra transición. En todos los países cada cual hace su tarea, por un lado, el partido y por otro el gobierno. Nadie puede decir que Obama impuso a Hillary Clinton como su candidata. Esto es un gran problema del sistema político mexicano, incluso a nivel gobernadores. Imponen candidato porque imaginan que así van a ser protegidos y a su vez los sucesores darán continuidad a sus políticas.
Cuando el PRI pierde la Presidencia de la República, los dirigentes del PRI sabían que los gobernadores querían imponer a sus sucesores. Los dirigentes del PRI decían “si no apoyo al gobernador en su designación de candidato, me quedo sin recursos.” Es el mismo caso problemático con las alianzas actuales de Omar Fayad en Hidalgo y Rosas Aispuro en Durango que no pudieron imponer a su candidato y por eso el conflicto. Aunque Cabeza de Vaca sí impuso a su secretario de gobierno. No hemos sabido deslindar las tareas de dos instituciones relacionadas, pero con fines diferentes. La imbricación partido-gobierno es una de las razones por las que ha fracasado nuestra transición democrática, en todos los partidos. No fue cosa del PRI, fue del PAN, del PRD a nivel estatal y ahora con Morena no se diga.
3.- Usted considera que el quiebre decisivo con el PAN histórico se produjo en la actual dirigencia. ¿Cómo describiría los conflictos internos de hoy en el PAN?
Respuesta
. Siempre hay conflictos internos en todos los partidos entre doctrinarios y oportunistas. Eso en el PAN hoy se ha acentuado. Castillo Peraza decía que en la medida en que una masa crece, pierde cohesión interna. Cuando el PAN eran familias, había una identificación interna por el liberalismo de González Morín y la doctrina social cristiana de González Luna. Todos los partidos sufren desgaste por ejercicio del poder. Eso es lo que se da en el PAN hoy en día, por un grupo de gente que ha abandonado los principios. Hasta Luis Felipe Bravo hubo preocupación por la capacitación de los cuadros. En la década de los 40, te podría mencionar a 30 panistas predicadores que recorrían el país. Hoy no vemos más de 5 que salimos a dar la cara y conferencias. Fíjate la tragedia. Va la lista: Gómez Morín, González Luna, Herrera y Lasso, Preciado Hernández, Hinojosa, Manuel Ulloa, Luis Calderón Vega, padre de Felipe, Miguel Palomar, Abel Vicencio Tovar, Miguel Estrada Iturbide salían a dar conferencias y hablar con la gente. Andaban predicando en todo el país la doctrina del PAN. En cambio, ahorita se dan cursos de mercadotecnia electoral o promoción digital del voto. Ahí notas que el partido se inclinó al pragmatismo olvidando su mejor tradición. Hoy ningún partido está preocupado por difundir ideas.
4.- Usted ya destapó como su gallo para las elecciones presidenciales de 2024 a Juan Carlos Romero Hicks pero él no ha hecho, hasta donde tengo conocimiento, ninguna manifestación pública de semejante aspiración. ¿Son conciliables el destape de usted y el silencio de Romero Hicks?
Respuesta
. Sí lo manifestó en un desayuno con Carlos Alazraki y lo hizo en una reunión de un grupo del que formo parte, Plumas Azules. No está tan posicionado porque no hemos comenzado. Ahora mismo es competente, pero aún no es competitivo. Tenemos tres años para hacerlo competitivo, porque no tengo duda que es el más competente.
5.- ¿Cuáles son o deberían ser los referentes ideológicos internacionales contemporáneos del PAN?
Respuesta
. El Partido Popular en España, antes la COPEI de Rafael Caldera en Venezuela. Tuvimos vinculación la democracia cristiana de Efraín Montalvo en Chile. Hubo un tiempo en que en Latinoamérica tuvieron relevancia los partidos demócrata cristianos. Desde luego, la referencia más importante es el CDU de Alemania y su fundación Konrad Adenauer, ahí tuvimos gran vinculación, aunque era más fuerte en el pasado. Con el Partido Popular vino muchas veces Aznar a platicar. También otros ideólogos de aquel partido vinieron a dar cursos. Yo incluso fui con Vinicio Cerezo a Guatemala.
6.- ¿Por qué ya no existen políticos activos formados con un bagaje cultural amplio como el de otras generaciones? ¿Qué ha pasado en la política mexicana para que se imponga la insignificancia intelectual entre jóvenes y viejos sin importar si se autoproclaman de izquierdas o derechas?
Respuesta
. El gran reto para todos los partidos es imprimirle mayor cultura a la política. El problema de México es su endeble y primitiva cultura política. Desde mi punto de vista la terminología izquierda-derecha ya es obsoleta. Como decía Carlos Monsiváis, cuando ya tenía las respuestas me cambiaron las preguntas. La tarea más importante de los partidos de aquí al 2024 es un inmenso trabajo de pedagogía política empezando por la historia de México. La historia de sus partidos, sus luchas ideológicas y sus transformaciones. Para mí el momento de confrontación ideológica decisiva fue la Reforma. La Revolución no lo tuvo ni la Independencia. De la Revolución a la fecha, por ejemplo, yo pondría en duda la izquierda de Cuauhtémoc Cárdenas y Muñoz Ledo. ¿Cuauhtémoc Cárdenas gobernó Michoacán como izquierda? Yo lo veo más como nacionalismo revolucionario. Éste sería un buen ejercicio ¿Morena es de izquierda? Pienso que no. Morena no es un partido en primer lugar. Es una estructura que creó Andrés Manuel que rompe con el PRD porque no logra imponer a Alejandro Encinas como presidente. Los que se van con Andrés Manuel le veían más posibilidades electorales y los que no se pudieron ir a Morena fue porque Andrés Manuel les cerró la puerta. ¿Cuáles son las ideas de Morena y sus propuestas? Ya ni la bandera de la lucha contra la corrupción pueden sustentarla hoy en día. Un gobierno corrupto no es de izquierda ni derecha, es corrupto.
7.- ¿Qué haría usted para volver atractivo el PAN a las nuevas generaciones?
Respuesta
. Tenemos que vencer la resistencia y repudio de las nuevas generaciones para involucrarse en política a través de la pedagogía política. Tenemos que retornar, en el PAN cuando menos, a la era de los predicadores, pues además, lo más trascendente de que disponemos, la doctrina panista, sigue teniendo enorme vigencia. El pensamiento de Gómez Morín y González Luna tenemos que hacerlo más accesible. Hacer un ejercicio de sencillez, más llano. La doctrina del PAN es difícil de transmitir en la época actual inundada por nuevas tecnologías y la posverdad, en un mundo global.
Esas tecnologías si se saben utilizar con propósitos nobles, ayudan, pero desafortunadamente están tan llenas de basura que desgraciadamente han tenido el efecto contrario. Es lo que escribió mi amigo Jose María Lassalle en su libro del Ciberleviatán, o lo que hemos visto en Estados Unidos y otras naciones, como la intervención de Putin en la elección de Trump.
En Alemania el CDU sí está haciendo pedagogía, Francia también tiene ese ingrediente. Se propicia más en los regímenes parlamentarios por la confrontación de ideas, que se da mucho más que en el régimen presidencial. Por ejemplo, ahí está Cayetana Álvarez de Toledo en España, una parlamentaria de primer orden. Otro país que lo está haciendo es Israel. Esta enorme alianza que formaron para detener el cacicazgo de Netanyahu es un gran ejemplo. En Europa, de las repúblicas que se separaron de la URSS, las repúblicas del Báltico han logrado avanzar en darle sustento cultural a la política.
8.- ¿Cuál es la salida para los conflictos internos del PAN y la hoja de ruta que usted le propondría para volver a ganar elecciones?
Respuesta
. El 24, ahí está el desiderátum no tan solo del PAN sino de México. El problema del panista es que no es un político profesional como el priista. El panista se asoma a la política y como tiene otra forma de vida, si no le gusta, se retira. Hay un pecado de origen porque en el discurso fundacional de Gómez Morín, él llega a decir que aquí hay gente que no son políticos profesionales, sino obreros, empresarios, comerciantes que dedican su tiempo libre a la política. El gran problema de la política es la falta de políticos profesionales. Dice Aguilar Camín que lo único peor que un político profesional es un político no profesional. Ese es el mayor problema del PAN. Jalar al panismo que está en su casa, retirado, es el panismo con el que ganó Fox y con el que se ganaron muchas gubernaturas y se hicieron buenos gobiernos. En Baja California fueron buenos los gobiernos de Ruffo y Elorduy por ejemplo. El PAN empezó a perder identidad al postular candidatos simplemente porque tenían más posibilidades de ganar. El daño lo hicieron las encuestas. Pobre político que vive obedeciendo encuestas y pobres partidos también, porque ahí se pierde la identidad.
Es lo que pasa con casos como el de Palazuelos, con Félix Salgado Macedonio, y en el PAN con Kiko Vega o Luis Armando Reynoso. Había conciencia en el PAN de que no iban a formar buenos gobiernos, pero con ésos ganábamos. Es el mayor mal de todos los partidos y por eso gana Cuauhtémoc Blanco en Morelos. En Sinaloa, hipotéticamente podría ganar el Chapo Guzmán. Estoy de acuerdo que se postule a quien pueda ganar, pero primero hay que reflexionar si va a desempeñar bien el cargo. Los partidos deben ser cedazos, filtros para postular a los más idóneos para desempeñar el cargo y después viene la tarea de hacerlos competitivos, para eso están las estructuras partidistas. Es el caso de Juan Carlos Romero. No tengo ninguna duda que sería un magnífico presidente, sobre todo en 24 cuando el país va a ser un desastre. Ya vimos el desempeño de Juan Carlos Romero Hicks como gobernador, senador, diputado, director del Conacyt. Lo vemos en su carácter, personalidad y sencillez. Sin ser equiparable, reúne las características de sencillez, discreción y prudencia de grandes gobernantes como Konrad Adenauer, Ruíz Cortines, o tus admirados Enrique Tierno Galván, Golda Meir, Harry S. Truman y Clement Attlee en los libros que me has regalado. El reto del PAN es hacerlo competitivo y tenemos tres años para conseguirlo. Sí se puede. El riesgo está en Marko Cortés y su afán de las alianzas. Tengo serias dudas de que esas alianzas correspondan a otros criterios positivos, no tengo la certeza que les preocupe la formación de buenos gobiernos. Si esa batalla la pierde el PAN y salen con un candidato que obedezca a otros esquemas, entonces vamos a ir al fracaso. Yo no tengo duda que entre los personajes que conozco del PAN, el más competente es Juan Carlos Romero Hicks. Insisto, es tarea del partido hacerlo competitivo, pero es tarea de él también, necesita una actitud más agresiva para ser competitivo.
