Por Roberto Jiménez
Este jueves, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) informó que entre 2020 y 2022 un total de 8.9 millones de mexicanos dejaron de ser pobres, mientras que 1.7 millones dejaron de vivir en la pobreza extrema.
Sin duda, se trata de una buena noticia, pero en las cifras publicadas por el organismo hay muchos enfoques e interpretaciones.
En primer lugar, es evidente un rebote después del fuerte impacto que tuvo la pandemia de Covid-19 en la economía del país: de 2018 a 2020 hubo un brinco de 3.8 millones de personas que cayeron en la pobreza, llegando a un total de 55.7 millones de mexicanos viviendo en esa condición.
Volviendo al buen dato de 2022, también ayudaron factores como el considerable aumento al salario mínimo, una fuerte creación de empleo, que se reflejan en un mayor crecimiento económico y, efectivamente, los programas sociales del gobierno.
Sin embargo, el diablo está en los detalles: entre 2018 y 2020 hubo 15 millones de personas que dejaron de tener acceso a servicios de salud, y de 2020 a 2022 se sumaron otros 15 millones. Así, en cuatro años llegamos a un total de 50.4 millones de mexicanos sin atención médica.
El otro punto que preocupa es que, a pesar de que no creció de 2020 a 2022, la cantidad de personas sin acceso a la seguridad social es apabullante: 64.7 millones de personas, lo que equivale a la mitad de todos los mexicanos. Es la carencia social más común.
Esto tiene que ver con el tamaño de la informalidad: hay cifras récord en creación de empleo, pero se trata de trabajos de mala calidad, sin prestaciones y con sueldos menores respecto a los puestos creados formalmente.
Es bueno que se reduzca la pobreza, pero hay mucho por hacer para mejorar las condiciones de vida de los mexicanos, como lograr que los apoyos sociales lleguen a quienes dependen más de ellos.
EL APUNTE
Menos pobres, pero más mexicanos sin acceso a la salud… Se anticipa una guerra de cifras entre corcholatas y taparroscas con los datos de Coneval de cara al proceso electoral de 2024.
