Este jueves 31 de octubre, Claudia Sheinbaum anunció una nueva estrategia para la compra de medicamentos en el sector salud. Esta vez, las secretarías de Salud y de la Función Pública se unen a Birmex con el objetivo de garantizar el acceso a los insumos médicos.
Se trata de la cuarta vez que la 4T realiza cambios en la materia, aunque en esta ocasión hay varias diferencias respecto a las medidas del sexenio anterior, las cuales ocasionaron un serio problema de desabasto. Tan sólo en 2023, más de 7 millones y medio de recetas no se surtieron efectivamente, según la organización Cero Desabasto.
Te contamos cómo ha cambiado el sistema de compras de medicamentos y cuáles son los principales cambios que propone la administración de la Presidenta Claudia Sheinbaum.
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Los cambios en el sistema de compra
Poco tiempo después de asumir la presidencia en 2018, el expresidente López Obrador realizó una reforma para centralizar las compras consolidadas de medicamentos en la Secretaría de Hacienda y Crédito Publico (SHCP), el objetivo era evitar la corrupción en los procesos de adquisición.
Según una investigación de las organizaciones Impunidad Cero y Justicia Justa, el cambio provocó retrasos y compras insuficientes debido a la falta de experiencia de los nuevos funcionarios encargados de llevarlas a cabo.
Antes de la reforma, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se encargaba de realizar estas compras cada año, no sólo para cubrir sus propios requerimientos, sino también para otras instituciones de salud federales y estatales.
En 2019, el gobierno mexicano vetó a las tres principales distribuidoras de insumos médicos del país, alegando prácticas oligopólicas. Ante la persistencia del desabasto, en 2020 el gobierno anunció que la Oficina de las Naciones Unidas para Servicios de Proyectos (UNOPS por sus siglas en inglés) se encargaría de la compra consolidada de medicamentos para el periodo 2021- 2024.
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Este segundo cambio en la estrategia no tuvo los resultados esperados. Y en 2022, después de sólo dos años de la intervención de la UNOPS, el entonces titular del Instituto para el Bienestar (INSABI), Juan Antonio Ferrer Aguilar, anunció el fin de la colaboración.
En diciembre de 2023, una nueva orden presidencial trasladó la concentración de compras de medicamentos a Laboratorios de Biológicos y Reactivos de México (BIRMEX). El mismo mes se puso en marcha la polémica “Megafarmacia”, la cual, hasta junio de este 2024, sólo surtía en promedio seis recetas al día.
¿Qué cambia con la estrategia de Sheinbaum?
El nuevo sistema de compras consolidadas de medicamentos e insumos médicos coloca a la Secretaría de Salud al frente del diagnóstico, planeación y coordinación de todo el proceso de compra. Si bien, BIRMEX seguirá llevando a cabo la ejecución de las compras, su intervención es sólo una parte del mecanismo, que consiste en cuatro etapas.
- Las instituciones de salud definen sus necesidades por clave y por punto de entrega.
- La Secretaria de Salud valida las necesidades y optimiza los insumos que n+se solicitaron.
- BIRMEX se encarga de ejecutar la compra consolidada
- Las instituciones de Salud suscriben los contratos y reciben los insumos para atender a la población.
Durante la conferencia matutina de la Presidenta Sheinbaum, el subsecretario de Integración y Desarrollo del sector Salud, Eduardo Clark, detalló que durante todo el proceso se implementarán sistemas digitales para aumentar la eficiencia, así como evitar la burocracia excesiva y “papelería abundante”.
Además, participará la Secretaría de la Función Pública para el seguimiento de las políticas de contratación, supervisar anexos técnicos y asegurar que la compra consolidada sea acorde con las necesidades reales de las instituciones.
Van por megacompra para 2025 y 2026
Para estrenar el nuevo mecanismo de compra, Clark presentó la compra consolidada para los años 2025 y 2026. Esto marca otra diferencia respecto a las estrategias del pasado, pues anteriormente la adquisición se llevaba a cabo por año.
El subsecretario calificó esta compra como “la más grande” en términos de volumen, pues concentra 4 mil 454 claves de medicamentos e insumos médicos que parten de la demanda de 26 instituciones de salud, entre las que se encuentran el IMSS, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), los Servicios de Salud IMSS-Bienestar y los hospitales pertenecientes a institutos nacionales de salud.
De completarse el volumen estimado, la compra representaría 4.9 mil millones de piezas. Para arrancar, el gobierno puso en línea la plataforma de difusión y discusión pública de las Compras Consolidadas de Medicamentos e Insumos Médicos del Sector Salud.
En la página web, cualquier persona puede consultar los proyectos de contrato previo a la convocatoria de licitación, así como emitir recomendaciones. Además de servir como un canal de retroalimentación entre potenciales proveedores y el gobierno, la página pretende ayudar a resolver una de las críticas más duras al sexenio anterior: la opacidad en la operación del sector salud.