La Subdirección de Adquisiciones de la Secretaría de la Defensa lanzó ayer una licitación, en la que nos dicen, busca contratar un servicio de oxígeno medicinal para reactivar instalaciones sanitarias militares que atienden pacientes con Covid-19. Nos hacen ver que, o la Sedena, a cargo del general Luis Cresencio Sandoval, es muy precavida o se prepara ante una eventual cuarta ola de Covid para este fin de año e inicio de 2022.
¿Lozoya cenará hoy en el Hunan?
Mucho se ha especulado sobre la suerte que le espera a Emilio Lozoya, quien comparecerá hoy en una audiencia de prórroga de plazo de investigación complementaria que se llevará a cabo en el Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte. Nos dicen que si todo le va bien a don Emilio, esta noche podrá cenar nuevamente en el restaurante Hunan, o en cualquier otro de su preferencia. Lo único que podría separar a Lozoya de un suculento plato y un buen vino, sería que la Fiscalía General de la República ejecute una nueva orden de aprehensión que tenga por ahí pendiente en su contra, pues, hasta donde se sabe, tanto la Unidad de Inteligencia Financiera como la Procuraduría Fiscal han presentado diversas denuncias contra Lozoya, cuyas investigaciones, parece, están listas para ser judicializadas en cualquier momento.
Monreal, afición por el macaneo
El que no macanea, no sale en la foto. Esta adaptación a una de la frases más conocidas de la picaresca política mexicana, bien se podría aplicar al senador y aspirante a la candidatura presidencial por Morena, Ricardo Monreal, quien aunque reconoce que nunca ha practicado el deporte oficial de la autollamada Cuarta Transformación, recomendó, por medio de sus redes sociales, ver al pitcher mexicano, José Urquidy, de los Astros de Houston en el partido contra Los Bravos de Atlanta. Además, don Ricardo también asistió en días pasados a un partido de la Liga del Pacífico en Culiacán. Así, al senador Monreal le ha llegado una repentina afición por el deporte del macaneo.
Un “pequeño” olvido de la CNDH
Al parecer, la titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, Rosario Piedra, tuvo un “pequeño”, pero muy relevante olvido. En el pronunciamiento por el Día Internacional para Poner Fin a la Impunidad de los Crímenes contra Periodistas, que se conmemoró ayer, doña Rosario no pidió que se mencionaran en el comunicado oficial a los 49 periodistas mexicanos asesinados durante el periodo de la actual administración. En el documento se hace una referencia general a las cifras a nivel mundial y en América Latina. Nos dicen que la impresión que queda es que la CNDH no quiere incomodar a nadie con las cifras de impunidad casi total que existen en el país en los casos de asesinatos y ataques a periodistas.