El efecto de Culiacán sobre AMLO

A partir de algunas encuestas y sondeos realizados en redes sociales, muchos se han apresurado a decretar que la liberación del narcotraficante Ovidio Guzmán le hizo “lo que el viento a Juárez” al presidente Andrés Manuel López Obrador. Sin embargo, especialistas en este tipo de estudios comentan que es demasiado pronto para hacer este diagnóstico por varias razones, una de ellas: porque al ver las fechas de levantamiento, algunos de estos números resultan de preguntas hechas antes de la liberación del hijo de “El Chapo” Guzmán y de la demostración de poder de fuego que el cártel de Sinaloa mostró. Además, nos dicen, hay que esperar a los números derivados de levantamientos en vivienda y que llevan continuidad con preguntas y muestras de población iguales a meses anteriores. Entonces se verá en realidad cuánto le costó al Presidente autorizar la liberación del hijo del capo.

La silla vacía del ministro Medina Mora

Nos dicen que la terna para cubrir la vacante que se generó por la escandalosa renuncia de Eduardo Medina Mora como ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), llegará, como dice una canción “para abril o para mayo”, pero del 2020. Nos hacen ver que esa fue la información que recibió el coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, desde la Presidencia de la República, por lo que de aquí a lo que termina el año, don Ricardo “solamente” debe preocuparse por la renovación de la presidencia de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y de las designaciones pendientes en el Consejo de la Judicatura Federal, de magistrados estatales y de nombramientos en Pemex.

Contra Delgado, entrada sucia y por detrás

Nos comentan que “alguien” dentro del partido ordenó cancelar la asamblea de Morena en Iztacalco el pasado domingo, justo cuando el coordinador de los diputados morenistas, Mario Delgado, estaba por entrar y postularse como consejero, y así cumplir con el requisito que le permitiera saltar a la cancha y competir por la presidencia del partido. Sin embargo, como le comentábamos ayer, todo indica que la intención era que don Mario no se registrara y así perdiera por default. Sin embargo, nos hacen ver que más que buscar una descalificación por default se trató de una barrida muy sucia y por detrás. Además del juego sucio, aseguran que el padrón de Morena es un desastre, pues el registro de Delgado aparecía como de la alcaldía Miguel Hidalgo el domingo, y el día de ayer en la alcaldía Iztacalco. Será que alguien le saque tarjeta roja a quien está detrás de la jugada sucia para dejarlo, como él acusa, fuera de la jugada. ¿Y el árbitro?

Abrazos, no…gases

La Presidencia de la República confirmó que ayer “se dispersó una dosis moderada de gas lacrimógeno en el ambiente que no puso en riesgo la vida de ninguna persona” durante la protesta de esa mañana que realizaron alcaldes del PAN, PRD y PRI, quienes exigían una reunión para ver al presidente Andrés Manuel López Obrador. Si bien el sistema de gestión de cita de los ediles no fue el más correcto, y convertidos en manifestantes intentaron entrar la fuerza a Palacio Nacional, llama la atención que a diferencia de otros casos, sí se haya decidido aplicar contra ellos el uso de la fuerza. Hay quien asegura que el mandatario ha dicho hasta el cansancio que el practica la filosofía de “abrazos, no balazos”, pero nunca prometió no utilizar gases lacrimógenos de vez en cuando, en especial contra algunos opositores que no llaman antes a su secretaria para agendar una cita como Dios manda.

En la foto: Andrés Manuel López Obrador/ARCHIVO EL UNIVERSAL

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