Uno de los hechos más destacados en esta pandemia y que ha sido publicado en numerosos artículos y medios de comunicación es que, países liderados por presidentas y primeras ministras, han logrado enfrentar con mayor éxito esta contingencia internacional. Como ejemplos están Nueva Zelanda, Islandia, Alemania, y Dinamarca, entre otros y los factores de éxito van desde una implementación temprana de las medidas, hasta una comunicación cercana con la población. Pese a esta realidad, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), actualmente menos del 7% de los líderes globales son mujeres y la pregunta es ¿por qué no hay más?

Cada día resulta más importante el liderazgo de las mujeres y su participación en la toma de decisiones, no sólo en gobiernos, sino en organizaciones de todos los giros y tamaños. El año pasado, la revista Harvard Business Review publicó su lista anual de los 35 mejores CEOs (de 3,000 organizaciones y empresas analizadas), de los cuales sólo tres son mujeres; hecho que nos sigue confirmando que aún queda mucho para hacer para continuar impulsando el liderazgo y participación de las mujeres.

En México, de acuerdo con el informe “Women in business” de Grant Thornton, las mujeres mexicanas ocupan el 37% de puestos directivos en medianas empresas, mientras que únicamente ocho de cada 100 CEOs en el país son mujeres. Por otro lado, de acuerdo con el reporte Women Matter sobre México, titulado Una Ambición dos realidades de McKinsey & Company, el salario promedio de una mujer en un nivel sénior es 22 por ciento inferior al de los hombres y tienen menos probabilidades de ser promovidas que los hombres. Asimismo, de acuerdo con el reporte, cerrar estas diferencias elevaría la productividad e implicaría un 70 por ciento de incremento del PIB.

Desde cualquier enfoque, que las mujeres participen en puestos de toma de decisiones, ya sea en gobiernos, organizaciones y empresas, deriva en sociedades más prósperas, mejor preparadas y con más justicia. El equilibrio necesario para el buen funcionamiento y rendimiento de las empresas tanto públicas como privadas, es gracias a la presencia de las mujeres en puestos claves y estratégicos. Hoy, desde Fundación KIO Networks buscamos que nuestras acciones tengan un impacto positivo, con una perspectiva de género y teniendo presente que cada día, el papel de las mujeres es fundamental para el bienestar de la sociedad.

Este año, el Women Economic Forum tendrá como tema #BalanceEnAcción, con la misión de continuar potenciando el talento y la participación de las mujeres en todos los sectores de la economía mundial. Esta será la segunda edición que se lleva a cabo en México y la primera en Iberoamérica y contará con la participación de 150 países aliados y una cámara global con el objetivo de alcanzar iniciativas para el progreso económico de mujeres; fomentando el diálogo, las conexiones y la colaboración entre emprendedoras y líderes de diferentes sectores.

El Women Economic Forum destaca a las mujeres con importantes trayectorias y con actitud propositiva de sumar en el escenario en el que se han sabido desarrollar, ellas son testigos de capacidad y cambio, de emprendimiento y creatividad, de lucha y decisión ante cualquier adversidad. Se trata de evidenciar las capacidades de las mujeres en el campo de batalla, su respuesta, reacción y solución inmediata a diversas necesidades que hoy vive nuestra sociedad y llegar a maneras diferentes de resolver las distintas situaciones que se viven a diario en una empresa o institución pública o privada.

Phumzile Mlambo-Ngcuka, directora de ONU Mujeres, ha afirmado que aún falta un camino empinado por recorrer, sin embargo, el creciente número de mujeres en posiciones de liderazgo es alentadora. Este camino es el mejor que México puede tomar para asegurar un crecimiento económico sostenido, pero más importante, consolidar un futuro igualitario y con oportunidades para todas y todos.

Sin duda aún falta mucho por hacer, sin embargo, la combinación de la conciencia social y los casos de éxito que hoy existen en relación a las oportunidades brindadas a las mujeres, nos exigen y nos fortalecen para seguir buscando esa palabra muy sencilla de decir pero que contiene un alto grado de responsabilidad: IGUALDAD.

Directora de Fundación KIO Networks

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