Hoy inicia la Cumbre de Líderes de América del Norte en la Ciudad de México. El presidente López Obrador dialogará con Joe Biden y Justin Trudeau sobre diversidad, equidad, inclusión, cambio climático, medio ambiente, competitividad, migración, desarrollo, salud y seguridad.
Hay temas en la agenda que tendrán un mayor peso en las conversaciones, según han anticipado algunos funcionarios de los países vecinos.
Para los canadienses los asuntos energéticos son prioritarios. El primer ministro de ese país ha dicho que es importante resolver los desacuerdos en torno a las medidas que favorecen a las empresas de energía mexicanas.
Por su parte, el embajador Graeme C. Clark recordó que Canadá es el tercer inversionista en México y reconoció que uno de los temas complicados para la relación bilateral es justamente el energético.
Con Estados Unidos son varios los asuntos que requieren de estrecha colaboración. Los más de tres mil kilómetros de frontera que compartimos nos obligan a atender en conjunto retos inmensos como la migración y la inseguridad.
Este último está en el centro de la preocupación por la crisis de salud que vive la Unión Americana debido al consumo de nuevas drogas que están enfermando y matando a un número inusitado de personas. De hecho, el vocero del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, declaró que la visita del presidente Biden a México tiene entre sus principales objetivos tratar la problemática del tráfico de fentanilo.
Llama la atención que la disputa de las rutas en el noroeste del país para traficar esta sustancia la encabeza el grupo del que forma parte Ovidio Guzmán López. Su detención no solo sacude a esa región por la que se mueven el 75 por ciento de las drogas sintéticas de México a Estados Unidos, sino que es también un duro golpe mediático con eco en ambos países.
Esto casi obliga a asociar la recaptura del hijo del Chapo Guzmán con la visita del presidente Joe Biden. Sin embargo, esta tan importante acción también hace pensar que podría venir un cambio en la estrategia de seguridad del gobierno federal ante la creciente violencia en el país. Este diario destacaba ayer en su primera plana el doloroso inicio de 2023 con casi 400 asesinatos dolosos en tan sólo una semana. La hostilidad alcanza incluso a los niños. En 2022 aumentaron los asesinatos a menores a un nivel tal, que murieron más niños por arma de fuego en México que en Siria.
Los delincuentes están ganando terreno y hay que ponerles un freno. Veremos si la detención de Ovidio Guzmán es un primer paso de muchos en un renovado esfuerzo por proteger a los mexicanos, o una acción aislada para complacer al poderoso vecino que hoy nos visita.
@PaolaRojas