La emergencia sanitaria derivada de la pandemia del virus SARS-CoV2 (COVID-19) llevó a la implementación de la “Jornada Nacional de Sana Distancia”, la cual contempla diversas medidas de seguridad sanitaria, entre las que se encuentran la suspensión de actividades no esenciales, así como el confinamiento de las personas en sus hogares para contener la transmisión exponencial del virus. “Quédate en casa” ha sido la reiterada petición de las autoridades, la cual ha sido secundada de manera responsable por la mayoría de las y los ciudadanos.
El aislamiento social ha significado frenar un sinfín de actividades, trayendo consigo, al igual que para otros países, consecuencias económicas, un aumento de la violencia intrafamiliar y una alta prevalencia de trastornos relacionados con el estrés, lo que ha llevado a los gobiernos federal y de las entidades federativas a implementar diversos programas y estrategias para contener la problemática concomitante. Hoy, a pesar de las adversidades, sabemos de cierto que atender las medidas de las autoridades, es necesario para la mitigación del COVID-19, en estos momentos lo más importante es la salud y la vida de las personas para evitar trágicos escenarios como los que están viviendo diversas naciones hermanas.
Dentro de esta emergencia, el trabajo en casa, popularizado también con el término anglosajón home office, ha sido la respuesta de muchos centros de trabajo públicos, privados y sociales. La creatividad, el impulso y el compromiso para superar los estragos de la pandemia, han hecho del trabajo vía remota una alternativa para realizar diversas actividades laborales.
Por medio de dispositivos electrónicos y utilizando herramientas tecnológicas como el internet y aplicaciones digitales, ha sido posible la conectividad a distancia, la comunicación en tiempo real y la organización de nuevas formas de trabajo que han arrojado buenos resultados en cuanto a eficiencia, operación y toma de decisiones.
Lo anterior me lleva a recordar que, en 2017 la empresa de tecnología Citrix Systems, Inc. publicó el estudio “Los trabajadores digitales: ¿qué buscan? ¿cómo trabajan?”, el cual muestra que 42% de las y los mexicanos encuestados piensa que el home office haría su trabajo más productivo, ya que habría mayor equilibrio entre la vida laboral y personal, y usaría menos tiempo en el transporte público; el estudio señala como tercer factor más importante para buscar un nuevo empleo, el equilibrio entre la vida personal y profesional (14%), en segundo lugar el crecimiento profesional (16%) y en primer sitio el salario (27%).
Desde hace algunos años se ha impulsado el debate sobre las posibilidades del trabajo a distancia y la necesidad de legislar al respecto; la presencia de COVID-19 ha puesto nuevamente sobre la mesa la necesidad de esta modalidad laboral, así como la flexibilidad y escalonamiento de los horarios y el diseño de nuevos espacios de trabajo, a efecto de propiciar la conciliación entre la vida laboral y familiar, reducir los tiempos de traslado, cuidar el medio ambiente, disminuir el estrés y el gasto en trasporte.
Es claro que existen empleos que por su naturaleza no pueden realizarse de forma remota, pero existen muchas actividades en las que sí es posible, o bien hacerlo de manera combinada, particularmente para quienes ya utilizan aparatos electrónicos y plataformas digitales y no se requiere su presencia física, por ejemplo, de acuerdo al estudio antes citado, aproximadamente 90% usan correo electrónico, 86% teléfono, 44% aplicaciones para reuniones virtuales y 43% a para compartir archivos.
Es verdad que para muchos centros de trabajo, la actividad remota es una importante área de oportunidad que pueden asumir exitosamente para aumentar la productividad y mejorar la competitividad de la empresas, con pleno respeto a los derechos y conquistas laborales de las y los trabajadores de México, mejorar su calidad de vida al hacer posible la conciliación entre la vida laboral y personal, lo cual, daría lugar al desarrollo de nuevas masculinidades y el involucramiento paritario de las mujeres y los hombres en las tareas del hogar y el cuidado de los hijos. El contexto actual, de alguna manera, será una prueba para conocer los alcances y limitaciones de esta modalidad laboral.
#EnCasaLibreDeViolencia
Titular del Fondo Mixto de Promoción Turística de la CDMX;
activista social y exdiputada federal.