Contra la percepción de que ora la economía, ora la política, lo son todo en determinado momento, el encuentro de los presidentes de México y de Estados Unidos, y el primer ministro de Canadá, celebrado ayer en Washington, refleja la indisolubilidad entre ambas, trabajando juntas en busca de solución a los grandes y múltiples problemas que enmarcan la geografía de las tres naciones (migración, intercambio comercial, inversión en sectores claves como el energético y la minería, diplomacia, narcotráfico, tráfico de armas…).

Estos, históricamente, y más con en el T-MEC, se han regionalizado. Los que enfrenta una, se reflejan e impactan en las otras dos y viceversa, de tal modo que, con base en la disposición al diálogo, la construcción de consensos y la concreción de acuerdos, sus gobernantes han decidido afrontarlos con el mejor instrumento de que disponen, que es la política.

Para ello, debieron haber escuchado previamente, o seguro atenderán a posteriori, la voz de la Canadian Chamber of Commerce, la US Chamber of Commerce y el Consejo Coordinador Empresarial, en el sentido de que, de la Cumbre, deberían desprenderse acciones concretas y avances tangibles con base, especialmente, en la implementación plena del T-MEC.

Aunque este es básicamente un tratado comercial, tiene muchos vasos comunicantes que generan conflictos a millones de personas cotidianamente en todos los ámbitos. Los problemas suelen ser muy grandes, pero la buena voluntad, puesta en la acción dialógica, posibilita siempre un acuerdo. Para eso se reunieron Biden, Trudeau y López Obrador.

A sabiendas de que el comercio es fundamental para el crecimiento de la economía y el capital base de la solución a la problemática trilateral que se despliega en todas las vertientes para mucha gente, Biden, Trudeau y López Obrador, seguramente habrían buscado poner los cimientos de arreglo en la perspectiva que se los pidió el empresariado de los tres países.

Teniendo siempre como eje su pacto comercial, les hicieron notar la necesidad de que se atienda el tema de la competitividad, para lo cual el poder político debe garantizar ambientes de inversión abiertos y transparentes. En eso, difícilmente alguna de las partes podría estar en desacuerdo.

De manera conjunta, los capitalistas de EU, Canadá y México, pugnan por que se aproveche el aprendizaje de la pandemia de Covid-19 para mejorar la coordinación en la respuesta a las emergencias, haciendo ver que, de alinear la posición de industrias y servicios esenciales en los tres países, la población ganaría bastante en movilidad, seguridad y certidumbre. Tampoco es algo que alguno pudiera desestimar.

Así, lo que algunos analistas preveían como un encuentro para el sometimiento de la soberanía nacional sobre determinadas decisiones, seguramente ha quedado perfilado como un firme y sólido paso hacia una relación trilateral de entendimiento, colaboración y beneficio compartido, lo que pone de relieve que, con la economía y la política, juntas, se pueden alcanzar grandes logros.

Sotto Voce…

¿Prefiguran la sentencia contra el INE sobre el presupuesto que le rebajó el Congreso, las declaraciones del presidente de la Corte, Arturo Zaldívar, de que cuando se tiene vocación de servicio el presupuesto no puede ser excusa para incumplir con las obligaciones?... Omar García Harfuch, titular de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, rindió su tercer informe de actividades con datos alentadores en la lucha contra la criminalidad. La detención de casi 200 objetivos prioritarios, son un avance hacia la recuperación de la tranquilidad... Diez cuerpos colgados en Zacatecas, sólo el día de ayer, reflejan el infierno que se vive en esa entidad…La mancuerna que hacen el nuevo gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla y el alcalde Morelia, Alfonso Martínez, apunta a iniciar el gran cambio que requiere el estado para recuperar el ambiente de seguridad y llevar ante la justicia a quienes cometieron múltiples actos de corrupción durante el nefasto gobierno de Silvano Aureoles.