Por: Julia Arrivillaga

Durante el segundo trimestre de este año en Tabasco se iniciaron 7,324 carpetas de investigación por los diversos delitos que se reportan al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), 44% (5,773 carpetas) menos que el primer trimestre. Es la cifra más baja por lo menos de los últimos seis años. Destaca la información de abril y mayo donde se registraron 2,018 y 1,958 averiguaciones respectivamente.

Para identificar un mes con un volumen semejante nos remontamos a septiembre y diciembre de 1999 con reporte de 2,021 y 1,819 averiguaciones respectivamente. El cuarto y quinto mes de este año muestran niveles considerados atípicos para los registros de Tabasco. Ajustando esta información entre el número de días, durante estos meses se iniciaron menos de 70 carpetas. Contextualizando el número reportado por la entidad al SESNSP en los últimos seis años varía en un rango entre cuatro y poco más de cinco mil carpetas mensuales, equivale a un promedio de 155 a 165 por día.

Este comportamiento en los registros más que consecuencias de políticas públicas para mejorar la seguridad coincide con los días donde se anunciaron las medidas de sana distancia y disminuyó la movilidad, por lo tanto, al tener menos personas en las calles se reduce la oportunidad de cometer delitos en el espacio público.

En Tabasco, ¿Disminuyeron los delitos o se denunció menos?

La ENVIPE 2019 estima que uno de cada tres tabasqueños afirmaron haber sido víctimas de algún delito durante el año anterior, con una cifra negra del 93%, es decir, de cada 100 ilícitos que ocurren, únicamente en siete se inició una carpeta de investigación. Este dato corresponde a días normales sin restricciones ni cuidados por pandemia.

Al revisar la información correspondiente al acumulado enero-julio 2020 vemos que únicamente los registros por trata de personas muestran una carpeta más respecto al mismo periodo del año pasado. Los catorce restantes observan reducción.

Pareciera que esta caída en los números reportados al SESNSP es interpretada como logros importantes en la mejora de la seguridad del estado, pues escuchamos con preocupación el anuncio por parte del gobernador sobre la cancelación de proyectos importantes como la construcción del C5, se desconoce el número y estado actual de las cámaras que se encuentran funcionando, no hay mención sobre las condiciones del equipo adquirido con el empréstito durante la administración pasada como luminarias, arcos de seguridad, así como el destino final del dron.

Es probable que la reducción en el número de las carpetas sea reflejo de menos denuncia, se entiende que muchas personas hayan decidido no acudir a las autoridades anteponiendo su salud. También es posible que ante los brotes de Covid-19 que se dieron en la Fiscalía, ésta se haya visto afectada en su operación y redujo personal y horarios. Además de las dificultades del traslado que seguramente tuvieron algunas víctimas como consecuencia de las restricciones que se dieron en el transporte público.

Esta última teoría parece acertada, pues julio marca crecimiento en la mayoría de los registros respecto a los meses que lo anteceden, nos regresa al comportamiento que mostraban los ilícitos por lo menos a marzo de este año. Conforme regresamos a lo considerado como “nueva normalidad”, también las carpetas regresan a su línea de tendencia y el comportamiento de los delitos durante segundo semestre será diferente a lo observado.

Directora de Análisis y Estadística del Observatorio Tabasco
@jarrivillaga
@octabasco

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