Por: Gustavo Moriel Meraz
En la zona sur del estado de Chihuahua, el alcohol y las drogas ilícitas se han convertido en un importante problema de salud pública, no solo por las conductas asociadas a su consumo y los efectos adversos en la salud, sino también por la estrecha relación que guardan con el crimen organizado.
Según la Organización Mundial de la Salud el 5.6% de las defunciones a nivel mundial están asociadas al consumo de alcohol [1]; en México el consumo anual promedio es de 7.5 litros de alcohol per cápita, 16% por encima del promedio global, lo que lo sitúa en el octavo lugar de América Latina [2].
De acuerdo con la “Encuesta sobre Prevalencia del Consumo de Sustancias Psicoactivas en el Estado de Chihuahua” (EPCSP, 2019) que realiza el observatorio ciudadano de FICOSEC, el 45% de la población de 12 años o más consume o alguna vez consumió bebidas alcohólicas [3].
Cabe señalar que en 2020 debido a la pandemia por Covid-19, con el objetivo de disminuir la movilidad y evitar el alza en los contagios, en Chihuahua se restringió temporalmente la venta de bebidas alcohólicas. Esta situación generó un fenómeno en los municipios de la zona sur de la entidad, ya que, aún con las restricciones a la venta de estas bebidas, su consumo no sufrió cambios visibles.
¿De dónde salía el alcohol? De acuerdo con reportes policiales en medios de comunicación, el crimen organizado con prácticas monopólicas tomó bajo sus riendas la comercialización de este producto para satisfacer la demanda, triplicó su valor y sometió a la competencia con mano dura y violencia.
Previo al inicio de la pandemia las cifras del clandestinaje ya eran considerables, pues según los resultados de la EPCSP de 2019, en el estado el 45% de los consumidores han comprado alcohol de manera clandestina y en Parral, la principal ciudad de la zona sur de Chihuahua, este porcentaje alcanza el 65% [3].
El trabajo de las instituciones policiales para reducir la venta ilegal de alcohol es complejo, debido a las limitadas herramientas legales que existen en la entidad las acciones son pocas y no han generado una disminución significativa. En parte esto puede deberse a que la Ley de Alcoholes del Estado de Chihuahua solo establece sanciones pecuniarias y en ciertos casos el decomiso de producto [4].
En el campo de las drogas ilícitas el tema es más claro, pues la venta y distribución la realizan los grupos del crimen organizado, quienes modifican sus productos de acuerdo con las necesidades del consumidor y adaptan sus métodos de distribución con facilidad, por ejemplo, haciendo entregas como si fuera comida rápida, escabulléndose entre las lagunas jurídicas y las debilidades del sistema de seguridad y justicia.
Un estudio realizado por el Observatorio Ciudadano de FICOSEC en 2018 en el Centro de Reinserción Social de Parral, encontró que del total de personas privadas de la libertad con sentencia, el 58% estaba bajo el influjo de alguna sustancia psicoactiva antes de la comisión del delito [5]. Si bien el consumo de drogas no es causal automática de un hecho criminal, diversos estudios lo identifcan como un factor de riesgo.
La diversificación del crimen organizado en la zona sur de Chihuahua acapara muchos mercados, no solo el del alcohol y las drogas ilegales, si no cualquier otra actividad rentable que carezca de regulación o se encuentre en la ilicitud, como la prostitución, “huachicol”, tala clandestina de árboles, minería y el comercio de nuez, por mencionar algunas.
Se recomienda fortalecer a las instituciones policiales y de impartición de justicia, propiciando un ambiente de trabajo coordinado entre los diferentes actores que permita mejorar los procesos de investigación. Es importante armonizar la legislación penal y establecer sanciones que contribuyan a reducir estos mercados criminales.
@FICOSEC
Bibliografía:
[1] Organización Mundial de la Salud (2018). Alcohol. OMS. Rescatado de la URL:
https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/alcohol[2] Organización Mundial de la Salud (2014). Alcohol Consumption. Rescatado de la URL: https://www.who.int/substance_abuse/publications/global_alcohol_report/msb_gsr_2014_3.pdf
[3] Observatorio Ciudadano de Prevención, Seguridad y Justicia (2019). Encuesta sobre Prevalencia del Consumo de Sustancias Psicoactivas en el Estado de Chihuahua. Rescatado de la URL: http://observatoriochihuahua.org/productos/encuesta-sobre-prevalencia-de-consumo-de-sustancias-psicoactivas-en-el-estado-de-chihuahua
[4] Ley de Alcoholes del Estado de Chihuahua, POE 2017.12.20/No. 101. Rescatado de la URL: http://www.congresochihuahua2.gob.mx/biblioteca/leyes/archivosLeyes/1347.pdf
[5] Observatorio Ciudadano de Prevención, Seguridad y Justicia (2018). Investigación Sociológica a Personas Privadas De La Libertad Del Cereso Estatal No. 4.