La Cuarta Transformación está ya leyendo el ánimo ciudadano y comienza a enmendar camino. Un ejemplo es Veracruz donde ensayan ajustes estratégicos tras reconocer en los más altos niveles qué hay decisiones urgentes que tomar a la brevedad frente el fallido gobierno de Cuitláhuac García quien es señalado como un perpetrador consuetudinario de abusos de poder.
Desde Palacio Nacional se ha enviado a operar a un nuevo jugador para recomponer las relaciones con sectores lastimados por el errático gobierno de Cuitláhuac García quien ha roto los canales con el sector magisterial, los electricistas, los cañeros, los campesinos y los grupos religiosos. Se trata de Sergio Gutiérrez Luna , veracruzano y presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados.
Junto con Gutiérrez Luna está también en la encomienda la senadora por Morena Gloria Sánchez, cuya historia y prestigio garantiza la interlocución para resolver los agravios producto del mal gobierno de Cuitláhuac en uno de los estados más importantes en materia económica y política de México.
Según las fuentes de Palacio Nacional se ha definido que la secretaria de Energía Rocío Nahle no sea incluida en la reconstrucción veracruzana debido a su cercanía con Cuitláhuac García y su claro interés en la gubernatura de Veracruz, además de las revelaciones de los multimillonarios contratos otorgados a su compadre Arturo Quintanilla Hayek en las obras de Dos Boca, la refinería emblemática de Andrés Manuel López Obrador.
Una señal clara del rol que ya juega como operador Gutiérrez Luna es la perfectamente calculada difusión de la fotografía de las hamburguesas que compartió con la ministra Olga Sánchez Cordero y el hombre más rico de México, Carlos Slim Helú .
En fin, qué tal parece que la 4T quiere enmendar los errores en el estratégico estado de Veracruz poniendo al frente a un político joven y conciliador y a senadoras prestigiadas y queridas como doña Olga Sánchez Cordero y la veracruzana doña Gloria Sánchez. Todo rumbo al emblemático año electoral de 2024.
VUELTA CHIAPANECA
Hay una constante en México, la impunidad . Es increíble que se puedan robar a ojos vistas hasta ¡una universidad! Esto pasa ante la mirada complaciente del gobierno de Chiapas (igualito que en Puebla) de Rutilio Escandón.
Hoy, ante los ojos pasivos de las autoridades chiapanecas opera el Instituto de Estudios Superiores de Chiapas, mejor conocido como la Universidad Salazar, que fue tomada de manera violenta por el ex diputado del PVEM , Emilio Salazar Farías, quien fue denunciado por su propio padre por un fraude de 162 millones de pesos en su gestión como rector de esa institución.
El caso es que los estudiantes de esa universidad están en un lío porque por el pleito legal los estudios cursados en ese instituto superior no tienen validez pero el ex diputado sigue ofreciendo títulos y certificaciones que ahora ya no tienen validez.