Un joven inteligente me iluminó ayer. Charlando sobre La Mañanera me dijo que el ejercicio del "Quién es quién en las mentiras" es un acto de crueldad. ¡Sopas!
Me quedé pasmado. Y se explicó: es cruel exponer en la arena pública a una persona sin capacidad ni credenciales a juzgar a los periodistas .
Y tiene razón, Ana Elizabeth García Vilchis sale todos los miércoles a exhibirse y a demostrar lo que no es periodismo. Porque PERIODISMO es lo que no hace, porque PERIODISMO se trata de exhibir con información, pruebas y datos confirmados al poder público con el objetivo de servir a la sociedad y ponerle límites a los poderosos vengan de donde vengan.
Es triste ver los miércoles a una chica que nomás dice "no es cierto" a las críticas o comentarios que se refieren al Presidente o al gobierno de la autodenominada Cuarta Transformación . En serio.
Dice Carlos Marín que ser reportero es la expresión superior del ser humano. ¡Presumido! Él me enseñó a sentirme orgulloso de ser reportero, de ser periodista y con José Carreño Carlón , Pablo Hiriart y Agustín Granados a partirme el alma para buscar la fuente, hallar el documento, confirmar la información y más para entregar una buena nota, para pelearme la principal, para meterme en la primera plana, en los titulares del noticiero...
Y sin duda sería de gran relevancia contar con un espacio que desde la mismísima Presidencia de la República , con información oficial verificable, se exhiban las noticias falsas. Eso, por desgracia, ni se ve en el "trabajo" de la señorita García Vilchis ni en el de sus jefes. Es cruel lanzar al ruedo a alguien de esa manera.
Valdría la pena que en ese ejercicio se presentaran pruebas, documentos y más para que la sociedad tenga acceso a la información gubernamental . Pero por desgracia esta administración se ha caracterizado por la falta de transparencia y ¡caray! las mentiras.
En fin, estaría bien que entrenaran a la o al responsable de revisar las fake news . Pero para eso haría falta un periodista.
