Después de las elecciones por la presidencia del Comité Olímpico Mexicano, que ganó María José Alcalá, quedó de manifiesto la necesidad de unidad y de regulación de todos los integrantes del deporte de nuestro país.
La exclavadista y que además encabeza la Comisión de Juventud y Deporte de la Cámara de Diputados, hizo un llamado, incluso desde los días de campaña, para que todo lo que se hace de parte de los directivos, federativos y demás involucrados en el deporte tenga transparencia y vaya encaminado al desarrollo y a mejorar las condiciones de los atletas pensando en buscar futuros éxitos.
Y ese objetivo es el camino natural que se debería seguir en el deporte mexicano. Ahora, Alcalá y su grupo de trabajo tendrán mucho por hacer para lograr lo que han planteado, empezando por fortalecer la relación y colaboración con la Conade, para después hacer labor con las diferentes federaciones, en las que se necesita encontrar el punto para que el bienestar de su disciplina siempre esté por encima del personal.
Este es un momento importante, ya que ha comenzado el ciclo olímpico rumbo a París 2024 y, con sus contadas excepciones, poco sabemos de los planes a seguir para los atletas, de menos, para el próximo año. No es una labor sencilla, ya que para encontrar la unidad y un verdadero camino al desarrollo en el deporte, mexicano se tendrán que pisar los intereses de algunos cuantos. Pero de que se puede, se puede.
Ojalá se logre algo importante y que todos los involucrados entiendan que al final del camino, quienes importan son los deportistas. Para ello será muy importante la comunicación, el trabajo en equipo, algo que se ha olvidado desde hace tiempo. Porque en estos momentos ya no nos podemos dar el lujo de ir todos por su camino.
Ojalá lo logren, ojalá todos entiendan que tienen en sus manos mejorar y en verdad, logren esa unidad.
