¿Qué nos está pasando como sociedad? Justo en momentos en los que necesitamos sacar lo mejor de nosotros, pareciera que vamos hacia atrás en relación a la tolerancia y a la manera de comportarnos en los diferentes aspectos de la vida.
Lamentablemente, en los últimos días hemos visto a través de las redes sociales algunos tristes episodios de violencia y prepotencia que tienen como protagonistas a personas que se les hace fácil amedrentar, golpear y amenazar a familias por un incidente de tránsito. Peor aún, en el Estado de México documentaron una pelea entre elementos de la policía estatal y municipal, también por un problema de tránsito.
Y no es que este tipo de episodios sean nuevos o no ocurrieran en otros tiempos, pero ahora pareciera que ya ni siquiera detiene a las personas el hecho de que los estén grabando o que la policía esté presente. Ese aspecto es lo que ahora enciende aún más las alarmas.
Imaginen lo fácil que se le hace a algunos bajarse de su auto con un bastón de seguridad para golpear a un hombre enfrente de sus hijos. No hemos avanzado, por el contrario, vamos hacia atrás y por ello es que México continúa sufriendo.
Y esta violencia ni siquiera tiene que ver con ideologías políticas o de otra índole, tampoco con las clases sociales. Es una descomposición general de nuestra sociedad que tenemos que cambiar para generar un mejor futuro para nuestros niños y jóvenes. No se puede seguir normalizando la violencia y pensar incluso, que sería mejor tener venganza por sus propios medios que a través de las autoridades. Es cierto, también, que el sistema de justicia debe de dar certeza a los ciudadanos justo para que no piensen en solucionar las cosas por su propia mano.
Porque hemos visto muchos ejemplo de que cuando se toman revancha así, por sus medios, se puede generar una bola de nieve difícil de detener y que no los lleva a ningún lugar más que a más episodios de violencia y sufrimiento. ¡Ojo! No es renunciar a demandar y exigir justicia, sino hacerlo por las vías adecuadas obligando a las autoridades a actuar como se debe.
Los mexicanos estamos hartos de la inseguridad y de la violencia, pero piénsenlo, ¿qué hacemos cada uno de nosotros para erradicarla, de entrada, en nuestro círculo más cercano?
