En una conmemoración del Día del Niño es importante recordar la importancia de generar buenos hábitos en los más jóvenes del país. Ayudarles a encontrar una actividad importante para el desarrollo desde la infancia, lo cual por supuesto ayudará a tener un mejor futuro.
Siempre he pensado que, en el tema de los niños, es importante que los padres de familia entiendan que lo mejor que le puede pasar a un niño es que adquiera el hábito del ejercicio, y todo lo que son actividades que le ayuden a su crecimiento y formación integral.
Lo he vivido en carne propia desde que tengo uso de razón. Ahora con 81 años lo entiendo muy bien, ya que desde los 15 años mi trabajo era pensar en el beneficio de los niños, cómo cuando inicié cuidando niños en un centro deportivo.
Siempre he pensado que las actividades que adquieren mayor relevancia son las que inician desde temprana edad. La experiencia me ha dicho que cuando los niños empiezan a hacer actividades fuertes para su formación integral, no debe iniciar con edad avanzada.
Primero por salud. Si se planea que el niño o la niña hagan algo relacionado al deporte, al arte, deben buscarla a temprana edad y bajo las posibilidades de la familia, por supuesto.
Después, hay que entender que fortalecen su organismo para no ser una cifra más de la obesidad infantil que existe en México, de la que desafortunadamente somos el primer lugar en el mundo.
Estoy feliz porque toda la semana en la empresa acuática nelsonvargas se festeja el Día del Niño. ¿Por qué toda la semana? Porque los que van a la escuela, a veces no les da para festejarlo en un día en específico, y por eso tenemos actividades toda la semana.
¿Cuáles son los beneficios que le damos a los niños? Un regalo que a todos nos encanta, algunos dulces, un presente de la empresa a dónde van a desarrollarse día a día. Vemos con agrado más fotos que nos mandan de las sucursales, las fiestas en el agua, la convivencia, los regalos. En verdad lo disfrutan.
El Día del Niño debe ser todos los días, ayudándolos, enseñándoles y desarrollando sus potenciales. Respetándolos y buscando siempre lo mejor a partir de la disciplina que, por ejemplo, el deporte trae.
Desafortunadamente, he platicado con muchos padres que se arrepienten de que ahora sus hijos jóvenes, no tienen disciplina porque no adquirieron ningún hábito, se preocupan porque se van de fiesta y desafortunadamente ya es difícil recuperar el rumbo de muchos de ellos como para tratar de encaminarlos a un deporte y los beneficios que puede ofrecer, porque simplemente ya no les interesa.
Por eso hay que hacerlo desde los primeros años, en su desarrollo como niños, con disciplina que cuando lleguen a los 14 - 15 años les ayudarán a ser conscientes de cómo hacer sus actividades de la mejor manera.
Nuestra responsabilidad es crear un hábito que le beneficie a los niños para hacer buenos jóvenes. A mis hijos, por ejemplo, les decía que no me importaba que compitieran, pero sí que hicieran alguna actividad física. Hábito que va a salvar muchas vidas, que hará que los niños se desarrollen en un ambiente saludable.
Profesor