Próximamente la Federación Mexicana de Natación cumplirá un siglo de existencia y de prestación de servicios a la sociedad mexicana. Miles de atletas en los deportes acuáticos se formaron bajo la influencia de la cultura acuática que se fue forjando, de manera progresiva y escalonada, a lo largo de esos cien años. Muchos de ellos de talla mundial y olímpica, que bien merecen ser destacados en otro espacio, abundando en sus extraordinarias actuaciones.
Miles de entrenadores se educaron en el arte y la ciencia de preparar competidores destacados a nivel de país y para representarnos en eventos internacionales. Y ya en 1926 jugaron su papel, en ocasión de los I Juegos Centroamericanos y del Caribe , con sede en esta ciudad capital, cuando México dominó el área con creces, frente a los países hermanos de la región del Caribe y de Centroamérica, en la primera edición de los Juegos Regionales más antiguos de la historia.
Y se forjaron, al calor del obligado debate para crecer y de los proyectos y obras que se fueron edificando para lograrlo, muchísimos directivos, algunos de los cuales brilló con luz propia, como fue el Lic. Javier Ostos, quien llegó a ser presidente de la Federación Internacional de Natación durante dos mandatos de 4 años y, posteriormente, Presidente Honorario Vitalicio de la misma hasta su muerte, para orgullo de México. También destacaron otros muchos directivos que hicieron aportes sustanciales al desarrollo y crecimiento de los deportes acuáticos de nuestro país.
En otras palabras, la labor de décadas fue clave para que las modalidades acuáticas de México fueran respetadas no solo en la región, sino a nivel mundial, aportando muchos técnicos y directivos a los organismos de dirección internacional de estos deportes.
¡Todo ha cambiado drásticamente!
Pero todo ha cambiado drásticamente en perjuicio del país deportivo, de sus atletas y técnicos. Desde enero pasado la FMN ha sido suspendida por la Federación Internacional por violar sus estatutos y reglamentos vigentes. Por ese motivo apelaron al Tribunal de Arbitraje Deportivo en Suiza, apelación que les fue denegada por ese alto Tribunal.
¿Y qué ha sucedido después? Que no aceptan la sanción de la Fina ni la desfavorable decisión del Tribunal Deportivo Internacional. Para estos exfuncionarios de la FMN, con Kiril Todorov a la cabeza, sencillamente, las leyes y normas internacionales deportivas no existen. Hacen lo que les parece y se ríen de las autoridades mundiales de los deportes acuáticos e incluso de los Tribunales creados para regir la legalidad. Así de ese tamaño es la soberbia y desacato de estos individuos que han llevado al país deportivo (México) a su mayor descrédito en la arena internacional.
Varias veces me he acercado a las autoridades del gobierno, incluido el mismo Presidente de la República , así como a otros Secretarios, alertando de los problemas que han estado sucediendo en la natación mexicana y que dañan sobremanera no solo la actualidad, sino, sobre todo, el futuro inmediato por el abuso de poder de un grupo de personas que, de hecho, están tratando de hacer de la FMN una finca privada, con la anuencia de quienes deben poner orden no solo en la natación, sino en el deporte nacional en su conjunto.
Se han hecho reclamos en las conferencias de prensa denominadas “mañaneras” y se ha orientado por el Presidente investigar que sucede, pero no hay resultados. O bien han justificado con falsedades los hechos o sencillamente han mentido, no explicando la realidad de los hechos, ni la implicación que puede tener el desconocimiento de las autoridades mundiales de la natación y del arbitraje deportivo.
Pero si los argumentos anteriores no fueran suficientes para producir cambios y renovar las desacreditadas autoridades de esta institución, hay que decir que la CONADE , en periodos anteriores, otorgó grandes cantidades de recursos a la FMN, sin que sepamos en que los invirtieron y sin que ese problema se haya investigado y aclarado. Un hecho que, lamentablemente, sigue sin resolverse y, más que todo, porque se trata de dineros que fueron recaudados por el pago de inscripción a competencias y por las afiliaciones de atletas a la Federación Mexicana de Natación.
Solo resta saber cómo reaccionará la FINA y el TAS ante el desacato de los sancionados exdirectivos de la FMN, lo que puede traer consigo resultados peores para toda la natación mexicana. Si así sucediera, los grandes culpables no solo serán esos exdirectivos, sino las máximas autoridades deportivas del país que justificaron y apoyaron el estado de cosas que han estado sucediendo ante sus propios ojos.