Empieza la temporada de natación en el país, con la preocupación de la comunidad acuática por la dualidad de mandato en este deporte en México. Por un lado, la Federación Mexicana de Natación, sin aval de la FINA; y por otro, la Comisión Estabilizadora que puso el mismo organismo internacional.

Hay confusión. Los padres de familia quieren que sus hijos participen en eventos y la actual FMN (avalada por Conade) sigue haciendo competencias, diciendo que es la que dirige la natación de México, mientras la Comisión Estabilizadora es la única que puede seleccionar gente para representarnos a nivel internacional.

La gente se desespera, porque —para poder participar en eventos nacionales— se tiene que pasar por la administración del grupo sin aval de la FINA, lo cual es un problema grave, ya que quien está al frente de la dirección técnica es una persona que intenta —a como dé lugar— llevar a cabo el Campeonato Nacional que siempre ha sido de curso corto, ahora en curso largo, según él como selectivo para los Juegos Centroamericanos. Es una aberración, porque la Comisión Estabilizadora ya tiene un proyecto —junto con el COM— para decidir en abril el selectivo para Centroamericanos y Panamericanos.

Esto, lo único que hace es desestabilizar a los nadadores, a la comunidad y padres de familia que participan. Perjudica la operación de nadadores y entrenadores. Es increíble que una persona que organiza la dirección técnica, y que es presidente de la asociación de entrenadores que mañosamente formó para entregarle ese poder a la FMN, le comente a los deportistas que el selectivo a Juegos Centroamericanos es en diciembre, cuando oficialmente sería en abril. Lo peor es que esta persona antes criticaba la manera de trabajar de los dirigentes de la federación, y ahora es un incondicional.

Por otro lado, la FMN insiste en que tienen que afiliarse y pagar por eso, pero hace dos años y medio que no entregan recibos o facturas por lo que se paga, incluidos eventos. Alguien tiene que resolver este tema administrativo, que es muy serio. Lo peor es que la FMN solamente avala eventos que ellos creen convenientes. Es increíble la injusticia de este grupo.

Para no perjudicar a los nadadores, se cede, se inscribe, se pagan afiliaciones, pero lo único que pasa es que se pone en duda la credibilidad del deporte mexicano. Ahora, tendremos que ir a dar tiempos topes a eventos convocados por otros clubes, ya que los eventos que organiza ANV no son avalados desde hace tiempo por la gente que selecciona para ir a los Campeonatos Nacionales de Conade.

Los nadadores que tienen marca B para París sufren nuevamente por apoyo. Ahora van a Copas del Mundo, en Indianapolis y Toronto. Nadadores que han sido finalistas en eventos internacionales o en los 10 primeros, irán a estas competencias siempre con el apoyo de sus familias, quienes sacan adelante estos proyectos, cuando debería ser la Conade, porque se están preparando para Centroamericanos. Tendrán que apoyarlos sus institutos del deporte o los clubes a los que pertenecen, como es nuestro caso, que tenemos cinco o seis nadadores a los que habrá que apoquinarles, lo que solamente nos deja como conclusión que sigue siendo muy triste la realidad de la natación mexicana.

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