En los años 60 nuevos personajes aparecieron en la Ciudad de México con ropa de colores, jorongos, huaraches y sombreros, la Revista Claudia los llamó en aquel entonces la “rebelión de los niños fresas mexicanos”. Algunos eran jóvenes de familias acomodadas y otros “una dulce bofetada sobre la conciencia de la burguesía”. Renunciaban a todo para llevar una vida psicodélica, ser felices, amar al próximo y a la naturaleza. Hoy te contamos sobre ellos
Los hippies, la “rebelión de los niños fresas mexicanos”
Los hippies, la “rebelión de los niños fresas mexicanos”
Los hippies, la “rebelión de los niños fresas mexicanos”
Texto: Ruth Gómez y Carlos Villasana
En la década de los años 60, las calles de la capital vieron emerger a personajes que buscaban una forma de vida distinta a la establecida; con sus prendas multicolores, decenas de jóvenes se reunían los fines de semana en la Zona Rosa.
Su aspecto no pasaba desapercibido, los cabellos largos destacaban en hombres y mujeres, al igual que la ropa de colores, jorongos, huaraches o sombreros. La Revista Claudia de mayo de 1968, decía que dichos elementos simbolizaban la “rebelión de los niños fresas mexicanos”, ya que algunos de ellos eran hijos de familias de clase media y alta.
Paramanu Rachana y José Regino, hippies mexicaon que “han violentado el tradicional panorama capitalino”. Revista Claudia, mayo de 1968. Colección Carlos Villasana.
El movimiento hippie llegó a México a través de la publicidad proveniente de Estados Unidos, con artículos que promocionaban o describían la vida “relajada” de miles de jóvenes que habían decidido dejar la escuela, la casa de los padres, su posición social y cambiarlos por valores ideales como ser feliz, amar la naturaleza y al prójimo, independientemente si eran familiares, amigos o desconocidos.
De acuerdo al poeta estadounidense Allen Ginsberg, ser hippie era “estar en la onda” y uno de los lemas que caracterizaron a este movimiento en todo el mundo fue el “hacemos el amor, no la guerra”. Los hippies más jóvenes tenían entre 16 y 19 años, mientras que los “mayores” eran aquellos que tenían 22 años o más.
En la imagen de la izquierda, un grupo de hippies en 1967, durante un evento en San Francisco; a la derecha, Coyoacán en 1995, cuando se le mencionaba como el último reducto para los artistas hippies de la CDMX. Fotos: AP y Archivo EL UNIVERSAL. Diseño web: Rodrigo Romano.
Lo psicodélico de la época
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Zona Rosa, un punto de reunión
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