El Nueve, el bar gay que desafió los prejuicios en los 80
El Nueve, el bar gay que desafió los prejuicios en los 80

Texto: Daniela Jurado

En la Zona Rosa , en la calle de Londres 156 existió un bar que durante 12 años dio cabida a grupos marginados por la sociedad debido a su rebeldía, vestimenta o por su homosexualidad. En el Disco Bar Nueve había lugar para todos.

Henri Donnadieu

y otros socios, entre ellos su entonces pareja Manolo Fernández, tuvieron la idea de crear este sitio, el proyecto duró del 23 de enero de 1977 al 6 de diciembre de 1989. Henri es originario de Francia y se exilió en México, llegó el 1 de diciembre de 1976, cuando tenía 33 años; él ya había venido al país de vacaciones y se había enamorado, por eso no dudo ni dos veces en vivir aquí.

El Disco Bar Nueve era “ un bar de élite ”, como lo reconoce su mismo dueño, asistían Pedro Meyer, Pita Amor, Sasha Montenegro, entre otras personalidades de la época, motivo por el cual siempre estaba asediado por la prensa de sociales. Fue tal el éxito del lugar que Henri y sus socios replicaron la idea con una sucursal en Acapulco.

La historia del Nueve de Acapulco fue breve, de 1977 a 1979, pero desde su apertura fue bien recibido; sin embargo, el cierre de esta sucursal terminó con un escándalo. Según nos contó Henri, un socio involucrado en la política provocó una redada que mandó a todo el personal a la cárcel.

“Nos acusaron de tener toneladas de mariguana y de cocaína. Todo era falso, estaba montado. Me tardé más de un año en sacar a mi equipo de la cárcel”, dice Donnadieu en entrevista telefónica.

El Nueve, el bar gay que desafió los prejuicios en los 80
El Nueve, el bar gay que desafió los prejuicios en los 80

“Ya es tradicional del Bar Nueve que sus propietarios Manolo Fernández y Henry Donnadieu (sic) continuamente organicen cocteles-homenajes a personalidades, en su mayoría del ambiente artístico”. Foto: Archivo EL UNIVERSAL.

Henri comenta que el arranque de El Nueve de la Ciudad de México y la efímera existencia de la sucursal de Acapulco fueron parte de “la época de los juniors de closet ”. En ese entonces el bar era completamente homosexual, lo visitaba toda la élite gay de la ciudad.

El Nueve fue uno de los primeros bares que se declaró abiertamente gay en los 70, hoy en día hay más apertura a la diversidad y más establecimientos LGBT+. En la imagen antigua, cortesía de Henri Donnadieu, se observa un performance en El Nueve; en la actual, la reapertura de El Marrakech tras la cuarentena (Foto: Fernanda Rojas/ EL UNIVERSAL). Diseño web: Rodrigo Romano

Un ambiente incluyente

Después del escándalo de Acapulco, Henri tomó las riendas del negocio y trató de imprimir su sello y darle otro giro al lugar. De entrada, lo abrió a todos independientemente de las preferencias sexuales, aunque fuera un lugar de esencia gay, quería dar cabida a todos en un ambiente de tolerancia y respeto .

“Mi enfoque desde el principio fue tener la mejor música, por eso iba hasta Londres, Berlín, Nueva York para conseguir discos. El Nueve se caracterizó por tener la mejor música en México, de hecho lo que se oía en el bar se escuchaba seis meses después en todas partes, fuimos muy novedosos en eso”, afirma Henri.

El Nueve, el bar gay que desafió los prejuicios en los 80
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El 16 de mayo de 1982 El Universal publicó que El Nueve ofreció una fiesta en honor a la actriz Claudia Ramírez, quien había sido nombrada como candidata a reina de la primavera con el fin de recaudar fondos destinados a la reestructuración del Centro Histórico de la Ciudad de México. En la foto del lado izquierdo sale la actriz, Henri y Xóchitl, madrina de El Nueve, y autoproclamada Reina de los Homosexuales. Foto: Archivo EL UNIVERSAL.

El teatro cabaret

“Abríamos de lunes a domingo. Lunes y martes eran los días más culturales, el miércoles era el día del cóctel con los shows de la Kitsch Company , compañía de teatro travesti ”, recuerda Donnadieu.

Cada semana Henri escribía los guiones y el diseñador Mongo confeccionaba una escenografía. Hacían parodias de telenovelas o de la política. En otras ocasiones presentaban espectáculos en los cuales imitaban a grupos como Alaska y Dinarama o a artistas como Marilyn Monroe que duraban de 10 a 15 minutos, nos comparte el dueño del Nueve.

Los jueves eran de rock, el viernes y sábado era normal y los domingos había tardeadas. Abría desde las 4 p.m. hasta la medianoche para que quienes no vivían cerca alcanzaran el último Metro.

El Nueve, el bar gay que desafió los prejuicios en los 80
El Nueve, el bar gay que desafió los prejuicios en los 80
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El Nueve, el bar gay que desafió los prejuicios en los 80
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“The Kitsch Company era la compañía de performance del Disco Bar 9 que creó Henri. Tuvo varias épocas e integrantes, pero sin duda el alma fue Jaime Vite”, según Armando Cristeto Patiño. En las fotografías se aprecia a Vite vestido de Klaus Nomi, Marilyn Monroe y Divine. Fotos: cortesía/ Henri Donnadieu.

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Jaime Vite y Miguel Ángel de la Cueva en un performance de la Kitsch Company. Foto: cortesía/ Henri Donnadieu.

Adicionalmente, los martes se proyectaban películas que estaban prohibidas en el país. Un día en los monitores del Nueve pusieron Dios te salve, María, de Jean-Luc Godard, lo que provocó que las autoridades clausuraran el cine club de Henri, ya que la cinta estaba vetada.

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Volante de la noche de cine en el noveno aniversario de El Nueve. Foto: cortesía/ Mongo.

El Sida, la pandemia de los 80

El alarmante panorama de 1985 ante los numerosos casos de VIH/Sida volvieron a El Nueve un sitio en el que se buscó informar y ayudar.

A propósito de ello, Henri encabezó esfuerzos junto con la asociación Cálamo. Producto de eso surgió una clínica especializada en la colonia Escandón en la ahora alcaldía Miguel Hidalgo.

Su pareja le puso el apodo de “El Enterrador” porque Henri acudía al hospital y a los sepelios de cada uno de sus amigos. “Fue una época terrible, murió mucha gente”, cuenta Donnadieu.

Metal, el otro bar que duró solo una semana

A la par de El Nueve se construyó, también en la Zona Rosa, pero en la calle Varsovia, Metal, otro bar ideado por Henri que a diferencia del primero en el que cabían 300 personas, aquí había espacio para tres mil almas que podían disfrutar del ambiente nocturno.

El Nueve, el bar gay que desafió los prejuicios en los 80
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Persona no identificada, Alejandro Brito (activista gay), Carlos Monsiváis (cronista) y Consuelo Saizar, quien fuera presidenta de Conaculta, en la inauguración del bar Metal el 13 de septiembre de 1989.  Foto: Cortesía/ Armando Cristeto Patiño.

Este proyecto duró tan sólo una semana, del 13 al 17 de septiembre de 1989, primero clausuraron El Nueve y tres días después Metal. La idea de este nuevo inmueble era hacer una sucursal en Nueva York para llevar y traer artistas de México, de acuerdo con el artista Mongo.

“El cierre nos dio en la madre, ya teníamos un lugar más amplio, fue muy malo incluso para México, nuestra intención era dar a conocer lo que la radio y disqueras no estaban dando a conocer, le estábamos dando fuerza al rock latino y a las artes nacionales. No duró lo que tenía que durar. Nos metieron la pata en el mejor momento”, dice Mongo respecto a las clausuras .

El Nueve, el bar gay que desafió los prejuicios en los 80
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Al centro el actor Armando Martínez “el pecas”, a la derecha de chinos Pacho baterista de la Maldita Vecindad. Foto: cortesía/ Armando Cristeto Patiño.

Las personas con las que hablamos para este texto y las crónicas que leímos nos revelan que, aunque el ambiente fue relajado, también hubo algunas riñas, como en cualquier otro bar con los clientes que se ponían agresivos al beber demasiado alcohol.

Los dos salones que tenía El Nueve, su escenario improvisado, su techo bajito y el poco espacio no fue impedimento para que los asistentes disfrutaran y aprovecharan del talento emergente de la época que hasta nuestros días sigue dando frutos.

“Todo el mundo iba al Nueve”, asegura el dueño del bar, cuenta que en una comida a la que lo invitaron en Palacio Nacional en 1999 el entonces presidente Ernesto Zedillo Ponce de León le dijo Henri, “yo también pasé por El Nueve”.

En la fotografía principal aparece Henri con Miguel Ángel de la Cueva, Jaime Vite y otros integrantes de la Kitsch Company durante la entrega de “El Nueve de Oro”. Foto: cortesía/ Henri Donnadieu. 

Fuentes:

  1. Tengo que morir todas las noches. Una crónica de los ochenta, el underground y la cultura gay, de Guillermo Osorno.
  2. Entrevistas con Henri Donnadieu, Mongo Sánchez Lira, Armando Cristeto Patiño.
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