El cambio climático en que muchos creemos y algunos líderes mundiales se empeñaban en negar, está presente con daños considerables.
Las inundaciones y los incendios forestales son eventos devastadores; se están presentando con mayor frecuencia e intensidad en todo el planeta. Son muestras evidentes de que el ecosistema global ha sido afectado por las actividades humanas y que su remediación requiere decisiones inaplazables.
En 1942 Walt Disney incluyó en la película Bambi una escena donde la irresponsabilidad de la fogata de un campamento causó un incendio forestal. La escena que parecía una fantasía, es hoy una pesadilla de la vida real.
El mes de junio pasado registró una de las más altas temperaturas de los últimos años, que provocan sequías, degradan los suelos, reducen la productividad agrícola y generan las condiciones idóneas para los incendios forestales.
En unas cuantas semanas, millones de hectáreas de bosques han sucumbido a las llamas en California, Oregón, Grecia, Perú, España, Portugal, Chile, Turquía, Italia, Rusia, Canadá, Líbano, Portugal, Finlandia, Francia, Túnez, Australia, Argelia y otras regiones. Y si estas calamidades no fueran suficientes, también se han registrado inundaciones de consideración en Europa, Asia y Norteamérica.
El reporte publicado por el Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC por sus siglas en inglés) ha dado una más de las señales de alarma que se han venido denunciando en las conferencias internacionales de las partes COP, el programa Copérnico de Observación de la Tierra de la U.E., el Acuerdo de París, el Protocolo de Kyoto, que actualizan los riesgos señalados en la Conferencia sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo de Río de Janeiro en 1992. En dicha ocasión, en mi responsabilidad como Presidente de la Comisión de Medio Ambiente del Senado de la República, se asumieron acuerdos para la remediación ambiental que el progreso industrial está infringiendo en el planeta. De ahí emana el Programa de Ecología y Medio Ambiente de la Fundación Miguel Alemán A.C. que coordina el ex rector de la UNAM Dr. José Sarukhán Kermez, por medio del cual se ha apoyado y reconocido a expertos, así como a organizaciones sociales dedicadas a la investigación, preservación y remediación de los ecosistemas y la biodiversidad del país.
Las decisiones de gobiernos, industrias y del modo de vida de la sociedad no pueden esperar. Es imperativa la colaboración internacional para emprender una tarea titánica de corrección que reduzca drásticamente las fuentes de contaminación y los deshechos tóxicos en el mar, y para que los aires y suelos recuperen la grave deforestación sufrida en las últimas semanas.
El último año demuestra que la suspensión del uso del automóvil, resultante de la cuarentena, no redujo mayormente las emisiones de CO2, por lo que es necesario revisar el volumen de emisiones de las fuentes fijas como su principal causa.
Es imperativo un compromiso para la remediación del daño ambiental a marchas forzadas, para recuperar las superficies boscosas y los espacios de la vida silvestre, reducir emisiones, reciclar materiales y disminuir el volumen de desperdicios con leyes severas, incentivos atractivos y compromisos concretos, pero sobre todo con la consciencia de que es una amenaza real donde todos somos corresponsables.
Rúbrica
Acusados de acoso. El alcalde demócrata de Nueva York, Andrew Cuomo, renunció para responder ante las denuncias de acoso sexual; y Trump se quería reelegir.
Político y escritor.
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