Con bombo y platillo se anunció el lunes, en el Senado de la República, una reforma al Poder Judicial.
No obstante, al día siguiente, al designarse a un conjunto de magistrados electorales locales, entre los elegidos se incluyó a varios de muy cuestionada trayectoria, entre otros, de manera señalada, uno en el Tribunal Electoral de la Ciudad de México, Armando Ambriz Hernández.
Al respecto, el columnista Raymundo Riva Palacio escribió el 17 de diciembre de 2018 lo siguiente:
Ambriz Hernández ayudó a que se “cancelara la posibilidad de anular la elección en Puebla, para que Alonso, esposa del Senador panista, fuera ratificada. Para ello utilizaron a Armando Ambriz Hernández, secretario de Estudio y Cuenta en la oficina de la magistrada Janine Otálora, presidenta del Tribunal”.
Riva Palacio agrega: “Ambriz Hernández es un zacatecano que… estuvo involucrado en otra decisión polémica a favor de Felipe de Jesús Cantú, quien ganó la elección para alcalde de Monterrey. La elección fue impugnada, pero al final el panista se quedó en el cargo”.
Días antes, el 17 de noviembre de 2018, otro columnista, Salvador García Soto, comenta que un “asistente de Janine… sugirió chantajear a los magistrados con la amenaza de que los removerían de su cargo si no cedían a las presiones para ratificar el triunfo del panista Felipe de Jesús Cantú. Armando Ambriz aparece como autor del mensaje reenviado…”
Más recientemente, el 2 de octubre de 2019, Francisco Rodríguez, de SDP, escribió que: “no se gana respeto imponiendo… y es que todo indica que las malas mañas entre los protagonistas de la política nacional siguen tan arraigadas, que ni aun con la 4T muestran signos de extinción. Por el contrario, siguen vivitas y coleando cual lo muestra el proceso de selección de la vacante de Magistrado Electoral en la Ciudad de México, realizado por el Senado de la República, que al parecer ya fue cooptado… tres son los candidatos con dados cargados..: Aldolfo Román Montero… actualmente Director General de Jurídico de la Delegación Cuauhtémoc… Armando Ambriz Hernández y Armando Hernández”.
Justo en los tiempos de la 4ª Transformación, justo cuando se habla de moralizar la función pública, justo cuando el fraude electoral se ha convertido en un delito grave y justo cuando se anuncia una Reforma del Poder Judicial, se designa a un operador de fraudes electorales como nuevo Magistrado Electoral en la Ciudad de México.
Ya con antelación, hubo una iniciativa para crear una nueva Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Y más recientemente se presentó otra iniciativa para reducir el periodo de la gestión de dos magistrados electorales federales. Y todo para nombrar, nombrar y nombrar nuevos magistrados.
Con todo lo acontecido y aquí relatado cabe preguntarse: ¿Cuál es la idea? ¿Reformar al Poder Judicial? ¿O construir una red de intereses desde el Senado para intervenir en él?
Si sobre la fuerza institucional del Senado se monta la construcción de un mecanismo para meter magistrados aquí y allá para operar a favor de determinados intereses políticos particulares, no estaremos atestiguando una transformación del Poder Judicial, sino la profundización de su descomposición.
Ya sucedió hace un año con las designaciones de magistrados electorales federales, ahora ocurre con los magistrados electorales locales. Estamos a tiempo de corregir porque esa tendencia, esa inercia, nada tiene que ver con una 4ª Transformación de la Vida Pública de México.
Senador de la República