Zoé Robledo aprovecha la crisis del sector salud para venderse como el ‘salvador’ del gobierno de la 4T, y consolidarse, desde ahora, como el único sucesor posible y viable del actual gobernador de Chiapas, Rutilio Escandón, en 2024. 

Robledo es uno de los encargados de intentar medio arreglar el desastre del abasto de medicamentos en el país, aunque la UNOPS se mantendrá como el negociador principal para la adquisición de medicinas hasta 2024, a pesar del pésimo trabajo que ha hecho. El presidente Andrés Manuel López Obrador prefiere que siga habiendo desabasto y mantener a una deficiente unidad de la ONU a la que se le han pagado unos cientos de millones de dólares, que regresar al antiguo modelo de compras. 

Sin embargo, el Presidente no ha dejado de externar su enojo con los titulares de Salud, Jorge Alcocer, y del Insabi, Juan Ferrer, por el desabasto de medicamentos. La semana pasada lanzó un contundente ultimátum a ambos funcionarios. 

“No debe de haber ninguna excusa para tener todos los medicamentos gratuitos, porque nos alcanza para entregar medicinas a todo el pueblo… Es un asunto de eficiencia, de aplicarnos, que no falten los medicamentos, es un compromiso… Tenemos que resolver el problema del abasto, esto es para Juan Ferrer, esto es para el doctor Alcocer. Ya no quiero escuchar de que faltan medicamentos”, sentenció.
 
De inmediato la Ssa, el Insabi y la UNOPS emitieron un ambiguo comunicado conjunto con el que, a través del uso de gerundios, pretendían dar certeza de que se resolverá el desabasto. “De manera conjunta, el Insabi y la Unops están finalizando la estrategia y el plan de acción para la licitación pública internacional que se lanzará próximamente y que integra las compras para el segundo semestre de 2022. Para ello, Unops continúa realizando reuniones con diversos actores interesados en participar, entre ellos se encuentran las principales asociaciones de la industria farmacéutica y embajadas de países como Alemania, Colombia, Corea, Dinamarca, Estados Unidos, Francia y Japón”. 

Como estandarte de su eventual candidatura al gobierno de Chiapas en 2024, Robledo también ha denunciado y posicionado el tema desabasto de medicamentos, para luego convertirse en el encargado de dar resolución a la problemática que ha marcado los tres primeros años de la administración obradorista. 

En su reciente comparecencia en el Senado de la República, el director del IMSS no sólo confirmó las demoras en los tiempos de entrega de los medicamentos e intermitencias en el abasto, sino que culpó al Insabi y a la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos de no poder adquirir o adjudicar 719 claves de fármacos. 

Para resolverlo, explicó que se debió realizar una compra sectorial en la que participaron, además del IMSS, la Sedena, de Luis Cresencio Sandoval; la Marina, de Rafael Ojeda; Institutos Nacionales de Salud, y el ISSSTE, de Luis Antonio Ramírez Pineda, quien por cierto ya anunció que saltará del barco y buscará participar, con escasas posibilidades, en el proceso electoral de Oaxaca en 2022. 

La realidad es que en tres años el nuevo esquema ha probado ser un desastre, por lo que el propio Zoé Robledo se perfila a sí mismo como el artífice de la solución, pues no le sería difícil revivir el esquema de adquisiciones que prevalecía en pasadas administraciones. 

Muestra de ello es que mantuvo con vida a las distribuidoras a las que AMLO acusó de acaparar el 60% de las ventas de medicamentos, tales como Maypo, de Carlos Arenas, y Dimesa, de Carlos Álvarez

De lograr su cometido, Robledo tendría en la bolsa la candidatura de Morena para el gobierno chiapaneco. En todo caso, pelearía o negociaría con el senador morenista Eduardo Ramírez Aguilar, o bien se enfrentaría a un fortalecido Luis Armando Melgar, quien preside la Comisión de Hacienda abanderado por el Verde. 

En su contra, Robledo tendrá los asuntos de corrupción ligados a él y a su familia, y algunos escándalos como la muerte de 17 personas en un hospital del IMSS en Tula. 

Es conocido en Chiapas que las huestes de Robledo llevan ya un tiempo trabajando el territorio para allanar el camino rumbo al Ejecutivo estatal. Quizá con la venia de Palacio Nacional es que se trabaja ya para construir una eventual candidatura para el titular del IMSS y tratarlo de coronar como el resolutor de la crisis de desabasto de medicinas. 

@MarioMal 
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