AMLO e IP acordarán reforma laboral previo a elecciones

La reforma laboral que busca reducir de 48 a 40 horas la jornada semanal va a negociarse en el último periodo de sesiones del Congreso de la Unión, previo a las elecciones del 2024, con tres candidatos presidenciales en plena campaña.

Este martes el presidente Andrés Manuel López Obrador dedicó una parte de su conferencia matutina a hablar del tema y propuso que no se apresure a resolverse el último día del actual periodo ordinario de sesiones en el Congreso, sino que se debata y se llegue a un consenso en el siguiente periodo, es decir el próximo año.

El objetivo del Presidente es electoral: qué mejor que el 2024, previo a las elecciones presidenciales en las que se renovarán más de 20 mil cargos públicos, para presumir una “victoria” política de una reforma laboral.

En el Congreso prácticamente no hay ningún partido que se oponga a la aprobación de la reforma laboral con la que AMLO planea cerrar su sexenio. Sería altamente impopular y un suicidio político que alguna de las fracciones politicas de la Cámara de Diputados o el Senado se oponga a lo que se consideraría una “victoria” para los trabajadores del país, un “triunfo” de justicia laboral.

Sin embargo, a pesar de que todos los partidos acompañarán la iniciativa, el que sacaría más réditos político-electorales sería Morena y el presidente López Obrador, quien ya decidió conducir el tema, el cual seguramente será recurrente en sus conferencias y actos públicos, apelando a la histórica justicia laboral, como lo ha hecho con el salario mínimo, que ha incrementado más de 150% en su sexenio.

Los parlamentos abiertos que se realizaron en la Cámara de Diputados para discutir el tema “pasaron de noche” a consideración del presidente López Obrador, por lo que deben retomarse. “La gente no se enteró”, dijo el mandatario este martes, sabedor de que es un tema irresistible en términos electorales.

“Que todo mundo dé a conocer su punto de vista, no solo serían los partidos, sino que se convoque a empresarios, dirigentes obreros, a los trabajadores, a laboralistas, expertos, a todos. Propongo que se abra el debate y que no dependa del 12 (de diciembre)”, expresó.

Las conclusiones de los parlamentos abiertos fue que no era un buen momento para llevar a votación esta reforma, pues tendría costos muy altos para las empresas, tomando en cuenta los aumentos de salarios, el incremento de las cuotas obrero-patronales a las afores, la extensión de los días de descanso (vacaciones), la eliminación del outsourcing y otras “conquistas laborales” que se han logrado en este sexenio.

Pese a todo, el Presidente está decidido a impulsar esta reforma antes de que termine su mandato. Presidentes de cámaras y empresarios consultados sobre el tema dijeron que ya están revisándolo con las autoridades laborales del país. La propuesta concreta es que sobre la iniciativa los empresarios pongan opciones sobre la mesa; es decir que propongan cuántas horas debería reducirse la jornada semanal de manera que no impacte sus costos laborales, su productividad y no se fomente el mercado informal. La idea es que se acuerde una reducción de 48 a 46 horas y que se progresivo, es decir en un mediano plazo, tal y como está sucediendo con el aumento en las aportaciones patronales a las cuentas para el retiro de los trabajadores y también con el salario mínimo.

El tema ha dividido a los empresarios: por un lado, Carlos Slim se pronunció en contra de reducir las horas laborales, pero a favor de que los trabajadores ganen más y tengan un mayor ingreso. Por su parte, Carlos Bremer, cercano a la 4T y a los hijos del Presidente, consideró que es positiva la iniciativa, contrario a lo que piensan la mayoría de las cámaras, como el CCE, la Concamin, la Coparmex y demás organismos de la iniciativa privada.

Será un tema que dará de qué hablar de aquí hasta las elecciones de junio del 2024.

Posdata 1

Luego de la fallida y fugaz precandidatura presidencial de Samuel García, hay mucha incertidumbre sobre cómo se va a elegir al nuevo candidato o candidata de Movimiento Ciudadano para competir por la Presidencia en el 2024.

De entrada, de los cuatro aspirantes, la única mujer con la experiencia y trayectoria política para contender, la senador Patricia Mercado, ya se descartó y buscará repetir como senadora o como diputada federal, para coordinar la bancada del partido en la siguiente Legislatura. Una lástima, pues se perderá la posibilidad de tener a tres mujeres candidatas compitiendo por el cargo de mayor jerarquía política en el país.

Quedan el coordinador de los diputados de MC, Jorge Álvarez Máynez, el senador Juan Zepeda y el líder del movimiento, Dante Delgado, quien niega haber sido “traicionado” por Samuel García, pero en confianza, con amigos, ha dado a entender que sí pudo haberlo “chamaqueado” el joven y voluble gobernador de Nuevo León.

Lo cierto es que si Dante Delgado se convierte en candidato presidencial de MC, le estaría dando el tiro de gracia al movimiento al que por momentos se le vio futuro, sobre todo con las nuevas generaciones de ciudadanos. Lo más probable es que el candidato sea Jorge Álvarez Maynes, según los liderazgos de MC, aunque será muy difícil que logre prender y alcanzar un buen reconocimiento en los meses que dure la campaña electoral. Movimiento Ciudadano aspira a ser grande y se va a quedar chiquito, chiquito.

Posdata 2

El gran ausente Morena el pasado domingo, durante la presentación del equipo que conformará el proyecto de Claudia Sheinbaum para una eventual presidencia que comenzaría en 2024, fue el recién nombrado rector de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas.

Si bien el rector hizo bien en no acudir a un evento que fue propiamente un acto de campaña, la presencia del economista y doctor en Historia era uno de los objetivos del evento, o por lo menos uno de los que habría ofrecido el coordinador del proyecto de la candidata, Juan Ramón de la Fuente.

@MarioMal