Andrés Manuel López Obrador lo volvió a hacer: bateó de mala manera a uno de sus asesores más cercanos, quien en el pasado lo había acompañado incondicionalmente y fue parte de su gabinete virtual en 2018. Gerardo Esquivel no fue ratificado como subgobernador del Banco de México por una decisión presidencial, a pesar de ser quien encarna, más que ningún otro, la política social y redistributiva que anhela el Presidente.
Licenciado en Economía por la UNAM, maestro por el Colegio de México y doctor por Harvard, Esquivel es uno de los economistas más completos del país, quien lo mismo publica textos, participa en foros, en programas de tv, da clases, explica asuntos técnicos en Twitter y elabora sobre política monetaria, a lo que se dedicó desde enero del 2019, cuando fue ratificado por el Senado para ocupar uno de los cinco asientos de la Junta de Gobierno de Banxico.
A Esquivel lo echaron del Banco de México a pesar de haber sido el subgobernador que mayor resistencia opuso a aumentar tan rápido las tasas de interés, justo lo que quieren todos los secretarios de Hacienda para evitar que se afecte el crecimiento y se incremente el costo de la deuda, y fue lo que reclamó en varias ocasiones López Obrador.
¿Por qué el Presidente no lo quiso ratificar? La respuesta va a ser siempre una incógnita, pero hay varios indicios que hacen suponer que simplemente dejó de confiar en él y, peor aún, de quererlo cerca de su gobierno y de la política económica. El hecho de haberlo enviado como candidato de México para competir por la presidencia del Banco Interamericano de Desarrollo fue una osadía. Pese a su experiencia en organismos multilaterales, Esquivel tenía perdida la pelea desde el minuto cero no solo porque México no era favorito, sino porque el Presidente ha sido uno de los mayores críticos de este tipo de instituciones. El resultado: Esquivel obtuvo 8.2% de los votos y fue el brasileño Ilan Goldfajn quien se convirtió en el nuevo titular del BID, con 80% de la votación.
Para no variar, López Obrador y la Secretaría de Hacienda se fueron en contra de Estados Unidos y los otros países que apoyaron al candidato brasileño, acusándolos de haber optado por “más de lo mismo”. A pregunta expresa sobre si, después del revés internacional, Esquivel sería ratificado como subgobernador, el Presidente dijo que no y que iban a explorar otras posibilidades. Tremenda bofetada. ¿Cómo puede entenderse que la carta fuerte de México para encabezar un organismo como el BID no fuera considerado para repetir como subgobernador del banco central?
Después el Presidente le echó la bolita al secretario de Hacienda con un “lo vamos a postular para que nos siga ayudando, seguramente el secretario va a hablar con él". Fue el 21 de noviembre. La mala noticia es que Rogelio Ramírez de la O no ve con buenos ojos a Esquivel, como tampoco veía bien a su antecesor, Arturo Herrera, pues fue, junto con Alfonso Durazo, artífice de la “caída” del exsecretario de Hacienda como nuevo gobernador de Banxico. La única forma de que pudiera hacerse efectiva esa propuesta sería que uno de los dos subsecretarios de la dependencia –Juan Pablo de Botton o Gabriel Yorio– saltara al banco central para que Esquivel tomará su posición, lo cual se ve poco probable.
Lo cierto es que el futuro de Gerardo Esquivel hoy no está en el extranjero. El mexicano Luis Felipe López-Calva, quien junto con Arturo Herrera anunció en mayo su incorporación al Banco Mundial, reveló que el Colegio de México inició el año más fuerte, con un académico que ha dedicado ya muchos años a formar científicos sociales en México.
El Presidente lo volvió a hacer como lo ha hecho con innumerables personas cercanas, amigos e integrantes de su gabinete: los ha desechado como si fueran sus adversarios.
Posdata. Sobre el hueco que deja Gerardo Esquivel en Banxico se pronunció ayer Jonathan Heath, uno de los integrantes de la Junta de Gobierno. Dijo que se pueden tomar decisiones sin un miembro, pero que es necesario que se proponga pronto. Al Presidente no se ve que le corra prisa y tampoco al secretario Ramírez de la O. Están deshojando la margarita entre Lucía Buenrostro, Jorge Mendoza y los dos subsecretarios de la SHCP.