Previo al anuncio del Frente Amplio por México y de la estridente irrupción de Xóchitl Gálvez como posible candidata presidencial de la oposición, la mayoría de los empresarios mexicanos, sobre todo los más politizados y con mayores recursos económicos –aglutinados en el Consejo Mexicanos de Negocios, el Consejo Coordinador Empresarial y el Grupo Monterrey– estaban prácticamente resignados a una continuidad de por lo menos seis años más de la llamada Cuarta Transformación (4T).
El presidente del CCE, Francisco Cervantes, ya había enviado invitaciones a los seis aspirantes a la candidatura de Morena y sus partidos aliados para reunirse con los líderes de las 14 organizaciones empresariales del Consejo. La idea es que expongan sus proyectos de país, sobre todo en temas como seguridad, salud, crecimiento, marco fiscal, regulación y Estado de Derecho. Las fechas aún no están definidas con ninguna de las “corcholatas” Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Adán Augusto López, Ricardo Monreal, Manuel Velasco y Gerardo Fernández Noroña.
Los tres primeros, que son los más competitivos, ya han tenido acercamientos con las cámaras empresariales por sus puestos anteriores. El que más reuniones recientes tuvo previo a lanzarse por la candidatura de Morena fue el exsecretario de Gobernación. En enero pasado fue invitado al primer Consejo Nacional, al que asistieron algunos de los principales empresarios del país, como Antonio del Valle, Juan Cortina y Claudio X. González.
Claudia Sheinbaum también se ha reunido con algunos magnates de las telecomunicaciones y con el Grupo Monterrey. La exjefa de Gobierno transita bien con los medios de comunicación, aunque debe conocer la regla de oro: la miel durará tanto como las encuestas y sondeos efectivos la sigan ubicando arriba en las tendencias. Con el Grupo Monterrey la llevó a finales del año pasado el exconsejero Jurídico, Julio Scherer, quien hoy se sabe está alejado de ella y de su equipo, al igual que su sobrino, el estratega y operador electoral Hugo Scherer.
Este martes la exjefa de Gobierno se volvió a reunir con industriales y empresarios de Nuevo León. A la convocatoria le ayudó el empresario regiomontano Francisco González. No fue nadie del Grupo de los 10 de Monterrey. Parte de la agenda que compartió fue la relacionada a los temas de energía, seguridad, educación y capacitación, mejora regulatoria y pymes. Una de las preocupaciones principales de Sheinbaum es su relación con los empresarios, quizá a sabiendas de lo que le dijo una vez el expresidente del CCE, Carlos Salazar –también regiomontano– al presidente Andrés Manuel López Obrador: “No se puede ganar una elección sin los empresarios y tampoco se puede gobernar sin ellos”.
Y Marcelo Ebrard, quien igual que Adán Augusto transita bien con los empresarios, más bien se ha dedicado a hacer una buena campaña de redes sociales, intentando ganarse a los jóvenes y a la clase media. El excanciller mantiene la fe en sus propias encuestas, que lo siguen posicionando de forma muy competitiva, y en que la clase media se decante por él. Hay muchos empresarios dispuestos a apoyar su proyecto, aunque la irrupción de Xóchitl Gálvez puede disminuir esa posibilidad.
La senadora panista, quien se perfila como la aspirante más fuerte del llamado Frente Amplio por México, también tiene la simpatía de los empresarios. Pese a que el presidente López Obrador quiere etiquetarla de “candidata de la mafia del poder”, a la hidalguense la van a apoyar los hombres y mujeres de negocios una vez que sepan que efectivamente va a competir frontalmente al candidato o candidata de Morena.
Por lo pronto los magnates mexicanos están inciertos y solamente las encuestas sobre l@s aspirantes a la candidatura presidencial van a disipar esas dudas. La moneda que parecía estar a punto de caer de un lado volvió a ponerse el aire con la irrupción de la oposición. Falta ver por quién apuestan los líderes del poder económico, quienes siguen moviendo muchos de los hilos del poder político del país.
Posdata
En medio de la efervescencia política-electoral de los últimos días, Mexicolectivo citó el próximo lunes a un evento masivo en un auditorio de la Ciudad de México. Bajo el lema “Una nueva visión de país”, este colectivo presentará una agenda ciudadana que entregará a los aspirantes por la candidatura presidencial.
Aún no es público quiénes participarán, pero es muy probable que coincidan Dante Delgado y Xóchitl Gálvez, de quien ha hablado muy bien el fundador y líder moral de Movimiento Ciudadano. “Es nuestra amiga”, dijo el lunes, con lo que se intuye no está cerrada a una alianza con la hidalguense. Aún está por verse si la posible colaboración será dentro del Frente Amplio o en solitario, pues se anticipan muchos sobresaltos de aquí a principios de septiembre, cuando se definirán los precandidatos del oficialismo y la oposición.
Para que Movimiento Ciudadano pueda pensar en integrarse al Frente Amplio por México tienen que pasar dos cosas: que se salga el PRI y que el candidato o candidata de la mega alianza tenga las características de Xóchitl Gálvez.
@MarioMal