Se confirmó que Víctor Rodríguez Padilla será el nuevo director de Pemex. Al académico de la UNAM le anunciaron hace poco más de un mes que se convertiría en el sustituto de Octavio Romero al frente de la petrolera, pero de último momento su nombramiento se pausó.
El 26 de julio, cuando se ratificó a Zoé Robledo como director general del IMSS, se tenía planeado anunciar a Rodríguez Padilla como nuevo titular de Pemex, pero los planes cambiaron por una solicitud de Andrés Manuel López Obrador: que se considerara la permanencia de Octavio Romero por lo menos para el arranque del próximo gobierno.
Las negociaciones entre los equipos de transición tardaron tres semanas y finalmente se encontró la manera de que Romero Oropeza no se aferrara a la silla: Claudia Sheinbaum le ofreció la dirección general del Infonavit, la cual era codiciada por muchos por el ambicioso proyecto de construir un millón de viviendas el próximo sexenio.
La presidenta electa optó por un perfil intermedio entre lo que hizo AMLO en su sexenio y lo que hicieron las administraciones anteriores: un académico, no un político y sin experiencia en el sector, como lo fue Octavio Romero, ni tampoco un tecnócrata-financiero de los que echaron mano los gobiernos de Salinas de Gortari hasta Peña Nieto.
La pregunta es si ese experimento va a funcionar. La situación de Pemex, que sí es crítica pese a que en la conferencia de hoy se intentó subestimar, requiere de un perfil con una combinación de características: un buen administrador, un buen financiero, un buen técnico y sobre todo un experto que esté al tanto de las tecnologías que se necesitan para acelerar la transición energética.
Los inversionistas y las calificadoras de riesgo le darán a Rodríguez Padilla el beneficio de la duda, pero sus resultados deberán ser tangibles en muy poco tiempo para evitar ya no solo la degradación crediticia de la empresa -que está a un paso de ser considerada una inversión de “alto riesgo”, es decir que es probable que incumpla con sus compromisos financieros-, sino la contaminación al gobierno federal y la calificación del “soberano”.
Las credenciales del nuevo director de Pemex son mucho mejores que las de Octavio Romero, pero lo dicho este lunes en su presentación no plantea un verdadero cambio o una nueva estrategia. Se seguirá apostando por la refinación, que solamente en el segundo trimestre de este año registró una pérdida operativa de 120 mil millones de pesos y en total de 261 mil 741 millones de pesos tomando en cuenta las pérdidas cambiarias.
Se confirmó que la producción de energía a través de combustibles fósiles se mantendrá en el 88.8% actual y únicamente la demanda adicional provendrá de nuevas inversiones en energías limpias, lo cual pone en riesgo los compromisos medioambientales firmados por México, como el Acuerdo de París, y lo estipulado también en el TMEC. Más aún, las empresas extranjeras tienen políticas de cero emisiones que podrían no ser compatibles con la transición energética de México, lo cual las alejaría del país.
Si bien se dijo que no se cierra la puerta a los privados, se puntualizó que la intención es fortalecer la participación de las empresas públicas, Pemex y CFE, por lo que incluso se va a reformar su actual régimen de Empresas Productivas del Estado a Empresas Públicas.
“Pemex no está muerta, no está tan mal como lo dicen los medios y las calificadoras”, dijo Rodríguez Padilla, abonando a la narrativa de desinterés de las opiniones de expertos y de quienes están contratados por la propia Pemex para hacer las evaluaciones sobre su capacidad de pago.
Finalmente se habló de “proyectos del futuro” en alianza con la sociedad, la academia y las empresas, pero no se especificó nada al respecto. De igual manera se reveló la elaboración de un Plan Nacional de Energía, que incluye a Pemex, CFE y a los organismos autónomos como la Comisión Nacional de Hidrocarburos y la Comisión Reguladora de Energía, el cual estará a cargo de Luz Elena González.
Posdata
La reestructura financiera de Pemex estará a cargo de la Secretaría de Hacienda, de Rogelio Ramírez de la O, y la operativa a cargo de la Secretaria de Energía, Luz Elena González. ¿Cuánto margen de maniobra tendrá el nuevo director de Pemex? ¿Por qué no adelantó algunos de los “proyectos del futuro” de los que habló?
@MarioMal
